Se espera una apertura confusa en EE.UU. a la espera de las primeras palabras de Trump para ver si hay realidades detrás de las promesas electorales.
Ya saben que hemos tenido un subidón tremendo en los mercados, precisamente descontando algunas de las promesas electorales, como son una fuerte rebaja de impuestos, facilidad para repatriar beneficios o ingentes cantidades de dinero para invertir en nuevas infraestructuras. El tiempo de comprar con el rumor ha terminado y ahora queda la confirmación de la noticia, así que todo el mundo está con muchísimo miedo por si lo que viene ahora son ventas.
Por si fuera poco, estamos a pocos días de que comience la temporada de resultados, así que el otro frente es ver si los beneficios empresariales justifican las altitudes conseguidas, ahora que nos metemos poco a poco en un nuevo ciclo de subidas de interés que ya ha tenido su segundo empujón alcista.
Las materias primas son uno de los puntos a vigilar, con el crudo como uno de los instrumentos que más está brillando, manteniéndose por debajo de los 52,5 dólares. Asimismo, el índice bursátil británico vuelve a sacar partido a la nueva debilidad de la libra esterlina tras los comentarios de la primera ministra del Reino Unido en donde se cree que hay miedo a que el divorcio con la Unión Europea sea duro. Si a esto le unimos el constante descuento de mayores inversiones e infraestructuras de Estados Unidos, China y Reino Unido, pues entenderemos algunas subidas de recomendación a mineras importantes. Por lo tanto, hay que tener vigilado al sectorial de materiales del S&P 500 (NYSE:XLB) junto, con el de energía (NYSE:XLE).
En el plano técnico, el Dow Jones de industriales sigue por debajo de los 20.000 puntos y el único que destaca, pues el NYSE se mantiene por debajo de la parte alta del canal alcista, es el Nasdaq que mantiene su estructura de expansión, manteniéndose por encima de los 5.015, y casi tocando la parte alcista de esa estructura como se puede observar en este gráfico: