Viena, 19 dic (.).- El mundo se encuentra en un punto de inflexión en cuestión energética, asegura la Agencia Internacional de la Energía (AIE), en referencia al acelerado desarrollo de las fuentes renovables en los países occidentales que ha desatado la guerra en Ucrania.
Durante una visita a Viena, el director general de la AIE, Fatih Birol, aseguró este lunes que debido a la invasión rusa de Ucrania el mundo se encuentra a la entrada de 2023 en una crisis energética global.
"Se trata de una crisis en la que la transición energética es la solución, no el problema. Pero aún hay mucha incertidumbre sobre cómo evolucionará esta crisis", señaló Birol durante una conferencia en la Universidad Técnica de Viena.
Según el responsable de la AIE, el futuro energético se basará en fuentes de energía bajas en carbono, por lo que el planeta tendrá que “confiar en las energías renovables, la eficiencia energética, las bombas de calor y todas las tecnologías neutras para el clima.”
“Tenemos que salir de los combustibles fósiles lo antes posible", agregó Birol.
En retrospectiva, sin embargo, el año 2022 no podrá considerarse solo como negativo sino también un "punto de inflexión en la historia de la energía", aseguró el director general de la AIE.
Las convulsiones desencadenadas en el mundo por la invasión rusa contra Ucrania han acelerado significativamente la expansión de las fuentes de energía renovables.
En los próximos cinco años se prevé la construcción de tantas instalaciones de energía renovable como en los últimos veinte años.
“El carbón ya no es el rey”, aseguró Briol.