La personalidad de Shark Tank y Dragon's Den, Kevin O'Leary, se posiciona en contra de lo que denomina "blood coin" o "monedas de sangre", es decir, Bitcoin (BTC) minado en China. El inversor declaró que a partir de ahora solo trataría con "monedas limpias", monedas extraídas con energía renovable, y sugirió que otras instituciones estaban comenzando a hacer lo mismo.
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"Cumplimos con las grandes instituciones, tenemos convenios sobre cómo se hacen los activos, si se quema carbono, si hay derechos humanos involucrados, si se hace en China".Cada ejemplo enumerado por O'Leary es uno que se aplica a la región minera de Bitcoin más grande del mundo: China, donde la electricidad barata alimentada con carbón representa aproximadamente entre el 50% y el 65% del hashrate total de Bitcoin. Nadie quiere comprar un Bitcoin procedente de China, dice O'Leary, quien sugirió que las instituciones estaban comenzando a buscar monedas "vírgenes", que se remontan a una fuente ambientalmente ética.