Tokio, 19 dic (.).- El Banco de Japón (BoJ) concluyó este martes su reunión de dos días sobre política monetaria, donde mantuvo inalterada su actual política de tipos ultrabajos, en un momento en el que la divisa japonesa, el yen, se ha recuperado ligeramente con respecto al dólar.
Al término hoy del encuentro, el banco central japonés mantuvo en el -0,1 % los tipos de interés a corto plazo y se comprometió a continuar con su programa de compras flexibles para que los bonos a 10 años se mantengan en torno al 0 %.
"La economía japonesa se ha recuperado moderadamente" y "las condiciones financieras se han acomodado", algo que, sumado a una ralentización de la inflación ha llevado al BoJ a adoptar está decisión continuista, ante las expectativas además de que la recuperación continúe, explicó en el informe.
A principios de este mes, el gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, dijo que la entidad ya tiene en mente varias opciones para las tasas de interés una vez las saque de terreno negativo, unos comentarios que avivaron los rumores sobre un posible cambio de política monetaria por parte del banco central nipón en un futuro no muy lejano.
Estas declaraciones también hicieron que el yen subiera bruscamente hasta las 141 unidades por dólar y las 154 unidades por euro, una tendencia que todavía se mantiene estos días, con la divisa japonesa intercambiándose hoy en la franja media de los 142 yenes por billete verde.
El encarecimiento del yen se registró tras un año en el que el abaratamiento de la divisa ha generado preocupación en el país asiático que llevó a varias intervenciones monetarias.
Esta caída se venía asociando con la divergencia creciente entre las subidas de tipos de interés que se han sucedido en Estados Unidos o Europa y la política monetaria del BoJ, que mantiene la tasa de referencia en terreno negativo y se ha mostrado partidario de mantener sus medidas de estímulo ultraflexibles.
Algunos expertos consideran que el BoJ podría poner fin a su política de tipos negativos en 2024 y también siguen de cerca otras medidas por parte el banco central para alcanzar su objetivo de situar inflación de forma estable alrededor del 2 %.
El índice de precios al consumo (IPC) de Japón aumentó un 2,9 % interanual en octubre debido al encarecimiento de la alimentación y en especial de los productos de primera necesidad, una ligera aceleración con respecto al mes anterior.
El parqué tokiota subía hoy un 0,12 % al descanso de la media sesión ante la cautela de los inversores por el resultado de la reunión del BoJ y un posible cambio en su política.