Fráncfort (Alemania), 13 oct (.).- El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés) publica la hoja de ruta para mejorar los pagos transfronterizos, prioridad durante la presidencia de Arabia Saudí de los países del G20, las economías más avanzadas del mundo.
El objetivo es que los pagos transfronterizos, incluidas las remesas, sean más rápidos, más baratos, más transparentes y más accesibles, al mismo tiempo que mantienen su seguridad.
Esta hoja de ruta ha sido creada a petición de los países del G20 para afrontar estos problemas, dijo el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, que preside el grupo de coordinación de los pagos transfronterizos en el Consejo de Estabilidad Financiera.
"Esta hoja de ruta puede significar una diferencia real al afrontar los desafíos de los pagos transfronterizos y el cambio se puede impulsar mediante la colaboración y el compromiso entre los sectores público y privado", dijo Díaz de León.
Los ministros de Economía y los gobernadores de bancos centrales del G20 se reúnen el próximo miércoles en la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial en Washington.
La mejora de los pagos transfronterizos tiene beneficios para los individuos y economías de todo el mundo, "apoyando el crecimiento económico, el comercio internacional y el desarrollo global", según el Consejo de Estabilidad Financiera, organismo que se creó en 2009 para preservar la estabilidad del financiera internacional tras la crisis.
Los individuos y las empresas pequeñas son los que más problemas afrontan con los pagos transfronterizos minoristas.
Además, en muchos países con economías emergentes o en desarrollo mucha gente no puede realizar esos pagos transfronterizos porque no tiene una cuenta bancaria.
Los pagos de bajo valor tienen con frecuencia "tasas elevadas", que son un porcentaje de la cantidad enviada, y suponen procesos engorrosos.
La población y las empresas de estados frágiles están entre los que no tienen ningún acceso a los servicios de pago.
El Consejo de Estabilidad Financiera ha recomendado recientemente a los países con economías emergentes o en desarrollo regular los servicios financieros de grandes empresas tecnológicas como Google (NASDAQ:GOOGL), Amazon (NASDAQ:AMZN), Facebook (NASDAQ:FB) y Apple (NASDAQ:AAPL), llamados "BigTech".
Google, Amazon, Facebook y Apple no son bancos pero ofrecen servicios financieros, sobre todo pagos y envíos de dinero en países con economías emergentes, donde gran parte de la población no tiene una cuenta bancaria, especialmente la población con bajos ingresos y en las áreas rurales.
Por ello, la expansión de los servicios financieros de las "BigTech" ha sido más rápido en las economías emergentes que en las avanzadas, tendencia que ha estado apoyada por el aumento de los móviles y accesos a internet, según el FSB, que se encuentra en el Banco de Pagos Internacionales (BPI (LS:BBPI)), cuya sede está en la ciudad suiza de Basilea.