Madrid, 22 mar (.).- El juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal ha rechazado la puesta en libertad bajo fianza del investigado por un presunto fraude con criptomonedas Javier Biosca, al entender que en la solicitud de su defensa no hay novedad alguna que modifique la decisión de mantenerlo en prisión.
En un auto fechado ayer, el titular del juzgado central de instrucción nº 1 indica que cuando se reciban y se examinen las órdenes europeas de investigación se podrán "confirmar o modificar los elementos instructorios e indiciarios sobre la comisión del delito que se investiga".
Nada nuevo aporta la defensa de Biosca a las dos peticiones previas de libertad efectuadas por su defensa el 2 y el 10 de febrero de este año y que se encuentran en trámite de apelación, añade el magistrado.
El juez mantiene así, de momento, a Biosca en la cárcel, en contra del criterio de la Fiscalía, que en un escrito fechado el pasado 19 de marzo al que ha tenido acceso Efe pide que se revoque dicha medida cautelar y se establezca prisión provisional eludible con una fianza de 1 millón de euros.
El ministerio público se inclina por la libertad bajo fianza al entender que "no hay motivos para sospechar que el investigado pueda destruir ninguna prueba".
No consta, añade el escrito, que Javier Biosca tuviera en su poder billetes de avión, barco o tren para salir del territorio nacional, y por el contrario son conocidos sus intentos de llegar a un acuerdo con las acusaciones para el pago de la responsabilidad civil.
Aunque la cuantía defraudada está aún por determinar, a través de las acusaciones particulares los perjudicados reclaman 818,5 millones de euros a Algorithms Group, sociedad a través de la cual operaba Biosca.
Javier Biosca, su mujer y su hijo están siendo investigados por supuesta estafa, intrusismo, blanqueo, delitos societarios, apropiación indebida y asociación ilícita; a través de la empresa Algorithms Group, captaba clientes con la promesa de rentabilidades del 20 % o del 25 % semanal.
A partir de los primeros meses de 2020, comenzó a dejar de pagar a la mayor parte de los inversores, algunos de los cuales son a su vez plataformas de inversión en bitcoines que invertían en la empresa atraídos por los altísimos intereses.
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