Caracas, 6 oct (EFE).- Venezuela ha acumulado hasta septiembre una inflación del 844,1 %, informó este martes el Banco Central (BCV), contradiciendo el promedio que maneja el Parlamento, según el cual solo hasta agosto el país sumó un 1.079,67 % de incremento en el índice de precios al consumidor.
El BCV publicó estos datos en su página web, en la que informó de que la inflación de agosto fue del 24,7 % y la septiembre del 27,9 %, con incrementos destacados en los costes de los bienes y servicios relacionados con la salud y la vivienda.
La entidad emisora venezolana no publica regularmente estos datos y la última vez que informó al respecto fue a comienzos de agosto cuando cifró la inflación de julio, situada en un 19,6 %, con un acumulado hasta entonces de 491,9 puntos porcentuales.
La Asamblea Nacional (AN, Parlamento) emite desde 2017 un registro mensual de inflación que ha sido tomado como válido en vista del silencio del BCV, que pasó casi tres años sin publicar ninguna cifra oficial.
La Comisión de Finanzas del Legislativo, que genera este informe mensual, elevó en septiembre la inflación acumulada hasta agosto al 1.079,67 %.
Según esta instancia, el índice se situó en agosto en un 25,04 %, precedido por un 55,05 % de julio, una tendencia que, aseguran, mantiene al país dentro de la espiral de hiperinflación en la que entró desde 2017.
El diputado Ángel Alvarado, miembro de esa comisión parlamentaria, dijo recientemente a Efe que la economía venezolana es hoy un 90 % más pequeña que hace siete años, cuando Nicolás Maduro llegó al poder.
Venezuela atraviesa desde hace más de un lustro la peor crisis de su historia moderna, una situación que alentó el éxodo de más de 5 millones de ciudadanos, según datos recabados por la Organización de Naciones Unidas.
El Ejecutivo venezolano achaca los problemas a una supuesta "guerra económica" caracterizada principalmente por las múltiples sanciones que países como Estados Unidos han impuesto al sistema financiero del país y a altos funcionarios del Gobierno de Maduro, al que unos 50 países consideran un dictador.
Maduro admitió recientemente que el país ha dejado de percibir 65.000 millones de dólares desde 2014.