Dusambé, 4 ene (EFE).- El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad,
promovió hoy la cooperación energética y política con Tayikistán,
país centroasiático con el que Teherán comparte idioma (farsi) y
raíces culturales persas.
Ahmadineyad se reunió en Dusambé con el líder tayiko, Emomalí
Rajmón, tras lo que firmaron, entre otros, un memorando de
cooperación energética y otro sobre el proyecto de construcción de
una central hidroeléctrica en el distrito de Aininski.
El líder iraní calificó a Tayikistán, país que ha visitado en
tres ocasiones en los últimos años, de "aliado natural" de Teherán
en el plano económico y político, esfera en la que ambas partes
"tiene intereses comunes y posturas cercanas".
"Irán y Tayikistán ha acordado que afrontarán conjuntamente los
desafíos a la seguridad regional, ya que ambos países desean la paz
y prestan especial atención a la situación en Pakistán y
Afganistán", que comparte más de 1.300 kilómetros de frontera con
este país, dijo.
Al respecto, añadió, "ambas partes están interesadas en que en
esos países se instaure una paz y estabilidad duraderas".
Ahmadineyad resaltó que "nada podrá debilitar los contactos entre
dos pueblos hermanos, cuyo idioma, cultura, religión y tradición es
común".
"Nuestras relaciones son un ejemplo de cooperación fértil y
constructiva para los países de la región", indicó.
Mientras, su homólogo tayiko calificó a Irán de "aliado
estratégico" y las conversaciones con el líder iraní de "amistosas".
"Apoyamos la creación de un programa nuclear pacífico iraní.
Todos los problemas al respecto deben ser solucionados a través de
conversaciones pacíficas y por vía diplomática", subrayó.
Rajmón, que visitó Teherán en marzo pasado, planteó a su colega
iraní la necesidad de acelerar la construcción de la central
hidroeléctrica de Sangtuda-2 de 220 megavatios de potencia, que se
encuentra en plena construcción en el río Vajsh.
Irán aporta 180 millones de dólares de los 220 en los que se ha
estimado el coste del proyecto, pero en los últimos meses las obras
se han ralentizado lo que preocupa a Tayikistán, que sufre una grave
escasez de suministros de energía.
Según la prensa local, Teherán estaría ralentizando a propósito
las obras ante la negativa de Dusambé de garantizarle el monopolio
de la generación de electricidad durante los primeros años de
operación de la central.
En 2006 ambos presidentes inauguraron la central Sangtuda-1 de
760 megavatios y que cubre el 12 por ciento de la necesidades
tayikas de energía eléctrica.
Ahmadineyad visitó la central de Sagntuda-2 y también se desplazó
al túnel de Istiklol que está siendo tendido en la carretera que une
la capital con la ciudad de Judzhand, en el norte de este país,
fronterizo con Afganistán.
"Estos proyectos serán beneficiosos no sólo para Tayikistán e
Irán, sino para todos los países de la región", dijo Rajmón en rueda
de prensa.
La prensa local había hablado la víspera sobre la posibilidad de
que se firmaran acuerdos de cooperación técnico-militar entre
Teherán y Dusambé, pero nadie confirmó hoy esas informaciones.
Irán, el tercer mayor inversor en este país, tras Rusia y China,
fue uno de los pocos que concedió asistencia financiera a Tayikistán
durante la guerra civil que dejó más de 100.000 muertos (1992-97) y
el país en ruinas.
Los intercambios comerciales bilaterales rebasaron los 160
millones de dólares en los primeros once meses de 2009, lo que
convierte a Irán en el quinto socio comercial de Tayikistán, tras
rusos, chinos, kazajos y turcos.
Ahmadineyad viajará mañana, martes, a Turkmenistán, país vecino
de Irán, donde inaugurará un gasoducto de 180 kilómetros entre ambos
países.
En un intento de incrementar su presencia en Asia Central,
Ahmadineyad ha visitado en varias ocasiones la región en los últimos
años, concedido créditos de inversión y solicitado su ingreso en la
Organización de Cooperación de Shanghai, que acoge a rusos, chinos y
centroasiáticos. EFE