La Habana, 17 nov (EFE).- El 70% de la superficie cultivada de
Cuba está "maltratada" por algún factor erosivo, mientras que otro
porcentaje similar tiene poca productividad, informaron hoy expertos
del ministerio de la Agricultura.
El director del Instituto de Suelo, Dagoberto Rodríguez, señaló
en una rueda de prensa en La Habana que 6,6 de los 10,7 millones de
hectáreas que tiene la isla son áreas agrícolas, pero solo la mitad
está cultivada.
Según Rodríguez, la superficie cultivada de Cuba se ve afectada
por problemas como erosión, salinidad y acidez de los suelos, lo que
contribuye al bajo índice de fertilidad.
El Gobierno impulsa desde 2001 un programa para la conservación
de los suelos, asunto prioritario en la isla desde que el presidente
Raúl Castro decidiera dar prioridad a la reanimación de la
agricultura y el incremento de la producción de alimentos.
El general Castro se ha quejado en varias oportunidades de que la
mitad de las tierras hábiles para la agricultura en Cuba estaban
abandonadas, por lo que en 2008 decretó la entrega en usufructo a
campesinos de suelos ociosos.
Una de las líneas fundamentales de su Gobierno ha sido "mirar más
hacia la tierra", pues en medio de la grave crisis económica que
sufre la isla, el Estado tiene que importar más del 80% de los
alimentos que consumen sus 11,2 millones de habitantes.
El programa de conservación de los suelos ha beneficiado hasta
ahora a unas 600.000 hectáreas de tierra, y se suma a los esfuerzos
del país por incrementar también las áreas boscosas.
Se estima que cuando la isla fue descubierta en 1492, el 89% de
su superficie estaba cubierta de bosques, pero en 1900 había
disminuido al 50% y en 1960 solo quedaba un 13%.
El director del área Forestal del ministerio, Carlos Díaz, indicó
que el plan de reforestación oficial permitió que en 2007 la
superficie boscosa alcanzara el 25,3% del país, pero agregó que el
compromiso asumido por Cuba en la Cumbre de Río es llegar a un 29%
en 2015.
La degradación de los suelos y la pérdida de la cobertura
forestal son dos de los principales problemas ambientales de la
isla, junto con la pérdida de diversidad biológica y la carencia de
agua, según los especialistas. EFE