Johannesburgo, 24 feb (EFE).- El fuerte aumento de las tarifas
eléctricas aprobado hoy por las autoridades de Sudáfrica puede crear
desempleo y frenar el crecimiento que la mayor economía de África
empezó a registrar en el último trimestre de 2009, tras nueve meses
de recesión, según aseguraron hoy diversos actores sociales.
La Agencia Nacional Reguladora de la Energía de Sudáfrica (NERSA)
aprobó hoy una subida de las tarifas de la empresa pública Eskom,
que suministra el 95 por ciento de la electricidad del país, de un
24,8 por ciento a partir del 1 de abril de 2010, un 25,8 por ciento
para la misma fecha de 2011 y 25,9 por ciento para 2012.
La subida es menor del 35 por ciento para cada uno de los tres
años que Eskom había solicitado a la NERSA para financiar su
proyecto de expansión de 52.000 millones de dólares, para garantizar
el suministro a todo el país.
El anuncio de la subida de la electricidad coincide con el de la
inflación, que en enero alcanzó una tasa anualizada del 6,2 por
ciento, una décima menos de la del mes anterior, que marco en 6,3
por ciento la inflación de 2009.
Aunque en el conjunto de 2009 el PIB de Sudáfrica perdió un 1,8
por ciento, en el último trimestre del año pasado las estadísticas
señalaban que el país había salido de la recesión y caminaba hacia
la recuperación de su economía, una situación que los agentes
sociales y económicos ven ahora amenazada.
La Confederación Sudafricana de Sindicatos (COSATU), aliada del
Gobierno del Congreso Nacional Africano (CNA), reaccionó con una
amenaza de huelga de sus dos millones de afiliados si no se
reconsidera la subida.
COSATU pidió la dimisión de la dirección de NERSA y señaló que la
medida puede causar una grave pérdida de empleos y amenazar el
actual nivel de vida de la mayoría de la población del país.
El otro aliado del CNA en el Gobierno, el Partido Comunista de
Sudáfrica (SACP), calificó de "catastrófica traición" a los pobres
del país las subidas anunciadas.
"Es de verdad muy triste que la mayoría de nuestro pueblo tenga
que pagar por los errores de las elites", que se "enriquecen" a
costa de los pobres, dice un comunicado del portavoz del SACP,
Malesela Maleka, quien agrega que el Gobierno ignoró, cuando estaba
a tiempo, las advertencias de que Ekom debía invertir en su
desarrollo.
Por su parte, la Cámara de Comercio e Industria de Sudáfrica
también criticó la medida y precisó que puede causar la perdida de
unos 250.000 empleos, en un país en el que la tasa de desempleo es
de un 25 por ciento, según el Gobierno y que el año pasado perdió
más de 900.000 puestos de trabajo debido a la recesión.
La Cámara de Comercio mostró su disposición a trabajar con Eskom
y el Gobierno para buscar soluciones, como la introducción de
operadores privados para resolver el problema de la producción de
electricidad.
El Foro Nacional de Consumidores se unió las críticas a la subida
y señaló que el aumento del precio de la electricidad "hará más
difícil la vida a los consumidores" y también hará que "aumente la
tasa de pobreza".
La oposición también criticó las subidas aprobadas, con las que
consideran que "los consumidores pagarán los fracasos del (Gobierno
del) CNA" y que afectarán especialmente a "los trabajadores y las
clases medias", según señaló el portavoz de la Alianza Democrática,
el principal partido opositor, Manie van Dik.
Sólo el partido del Gobierno, el CNA, por medio de su portavoz,
Jackson Mthembu, se congratuló de las subidas aprobadas por la NERSA
y señaló que suponen "una mejora importante" respecto a lo
solicitado en principio por Eskom. EFE