Tegucigalpa, 14 nov (EFE).- El Gobierno de facto de Honduras dijo
hoy que está abierto a buscar una pronta solución al bloqueo del
comercio de alimentos con El Salvador y negó que pretenda que una
negociación con ese país vecino signifique un reconocimiento de éste
al régimen que preside Roberto Micheletti.
"Estamos anuentes a sentarnos a discutir el tema al nivel que sea
necesario", dijo a Efe el ministro hondureño de Industria y
Comercio, Benjamín Bográn, quien subrayó que el problema comercial
está causando "pérdidas para los dos países".
Hasta ahora, las autoridades de Honduras sólo han mantenido
"contactos informales con los exportadores salvadoreños" afectados,
pero no con funcionarios del Gobierno de El Salvador, para buscarle
una solución al problema, indicó.
Honduras impide desde el pasado día 9 el ingreso de productos
salvadoreños para consumo humano como represalia porque El Salvador
bloquea desde el día 3 -"sin ninguna explicación", según Bográn- la
entrada de lácteos, camarones y carnes hondureñas.
El problema se remonta a la prohibición que Tegucigalpa impuso en
julio pasado al ingreso de huevos y otros productos avícolas de El
Salvador tras detectarse la presencia de anticuerpos de la influenza
aviar, de la que el territorio hondureño está libre, explicó.
Bográn afirmó que "el Gobierno salvadoreño ha elevado al nivel de
un conflicto comercial un tema que es eminentemente técnico,
sanitario", pues "empezó cerrando el ingreso de lácteos y ha estado
cada vez más estableciendo obstáculos de manera progresiva a
productos hondureños".
"El Gobierno hondureño ha tenido que tomar acciones recíprocas",
como impedir el ingreso de productos salvadoreños "para consumo
humano", pues "no hemos tenido ningún tipo de explicación" de las
autoridades salvadoreñas sobre el porqué de su bloqueo, apuntó.
Honduras mantendrá sus medidas "simplemente hasta que no se
resuelva este problema", añadió el ministro hondureño de Comercio.
Bográn rechazó las "declaraciones agresivas" de funcionarios
salvadoreños, entre ellos el canciller Hugo Martínez, "en el sentido
de que Honduras quiere que negocien para que así esto signifique
reconocimiento" al Gobierno de facto hondureño.
"En ningún momento queremos eso; estamos claros de cuál es la
posición y la actitud de los vecinos" ante la crisis política que
Honduras vive por el derrocamiento de Manuel Zelaya el 28 de junio
pasado, "y los respetamos, como esperamos que todos los países
respeten la autodeterminación de Honduras", enfatizó.
Honduras no pretende "obligar a ningún país de Centroamérica a
que tome partido con relación al problema del 28 de junio, es un
problema interno que lo vamos a resolver entre los hondureños",
puntualizó Bográn.
Por su parte, el director del Servicio Nacional de Sanidad
Agropecuaria de Honduras, Edmundo Toro, también manifestó a la
prensa que no se trata de un problema político, sino de índole
sanitaria, e informó que el Gobierno hondureño ha pedido ayuda a la
Organización Mundial de Sanidad Animal para resolverlo.
"No vamos a cambiar nuestra posición, porque el patrimonio
sanitario de Honduras debemos de cuidarlo. No estamos viendo la
parte política, sino la parte técnica", expresó Toro. EFE