Santiago de Chile, 11 jul (EFE).- La empresa estatal chilena Codelco, la mayor productora mundial de cobre, paralizó hoy sus actividades por una huelga general, la primera desde 1993, a la que según los sindicatos se han sumado 45.000 trabajadores.
Para la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC), convocante de la huelga de 24 horas, la adhesión es del cien por cien -15.000 trabajadores de planta y 30.000 contratistas-, mientras que la empresa no dio cifras de acatamiento pero confirmó que ninguna de sus divisiones está produciendo.
Codelco confirmó en un comunicado que la empresa "no se encuentra produciendo en ninguna de sus operaciones" y lamentó que se haya llevado a cabo una protesta que calificó de "ilegal".
Los trabajadores protestan por un plan de modernización que consideran el inicio de un proceso de privatización, pero la empresa niega toda intención de vender activos a privados y defiende que las inversiones buscan mejorar la producción.
La compañía consideró hoy que "no existen hechos reales que justifiquen" esta huelga y señaló que "siempre ha mantenido las puertas abiertas para dialogar con los sindicatos".
El ministro de Minería, Laurence Golborne, que consideró también "ilegal" este paro, destacó que la Administración del conservador Sebastián Piñera no tiene "intención de privatizar Codelco".
"No es parte de las prioridades o del programa de Gobierno, no es parte de ninguna actividad que se esté haciendo en esa dirección, al contrario. Lo que se ha hecho, por primera vez, es un apoyo decidido al programa de inversiones de Codelco", declaró a ADN Radio.
El presidente de FTC, Raimundo Espinoza, dijo a Efe que "están paralizadas las divisiones de Chuquicamata, Radomiro Tomic, Gabriela Mistral, El Salvador, Ventanas, Andina y El Teniente".
Por su parte, Codelco subrayó que la paralización de todas sus divisiones, la primera en 18 años, implicará dejar de producir alrededor de 4.900 toneladas de cobre fino y supondrá pérdidas por unos 41 millones de dólares.
La compañía informó de que los trabajadores han bloqueado el acceso a varios yacimientos desde primera hora de hoy, pero puntualizó que hasta el momento no se han producido hechos de violencia ni se han dañado equipos o instalaciones.
Aseguró además que se han implementado las medidas necesarias para mantener turnos de emergencia, acordados con los mismos sindicatos, que permitan reanudar la producción a partir de mañana, martes.
La huelga se efectúa en el día en que se cumplen 40 años de la aprobación, durante el Gobierno de Salvador Allende, de la ley que nacionalizó el cobre y dio origen a Codelco, cuya gerencia decidió postergar la celebración de esta conmemoración debido a la protesta.
Con este paro, según dijo Espinoza a Efe, los trabajadores quieren denunciar "la privatización encubierta que pretenden hacer de Codelco y particularmente con el yacimiento Gabriela Mistral".
Según el dirigente sindical, en el caso del Gabriela Mistral "pretenden traspasar sus pertenencias a una sociedad anónima".
Los trabajadores acusan a la actual administración de querer endeudar a la empresa para justificar una futura privatización, pero tanto el Gobierno como la gerencia han insistido en que lo que hay es un plan de modernización para mejorar la producción.
La compañía prevé invertir entre este año y 2015 unos 17.500 millones de dólares para compensar el descenso de producción debido a la caída de la ley del mineral y el cierre de algunas faenas, y llegar en 2020 a producir unos 2,1 millones de toneladas de cobre fino.
En 2010, la compañía produjo 1,76 millones de toneladas, un 11 % de la producción mundial, y entregó al Estado chileno beneficios por 5.799 millones de dólares. Con ello, en 40 años ha extraído unos 48,7 millones de toneladas y ha aportado a las arcas fiscales 84.000 millones de dólares.
El Gobierno de Piñera, que según las encuestas está en el nivel de popularidad más bajo de su mandato, también ha tenido que enfrentar en los últimos dos meses masivas marchas de estudiantes que exigen más recursos para la educación, y de ciudadanos contrarios a un proyecto hidroeléctrico en la Patagonia. EFE
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