Camaçarí (Brasil), 8 jul (EFE).- El fabricante español de aerogeneradores Gamesa inauguró hoy su primera unidad productiva en Brasil, país que la compañía espera que suponga entre el 10 y el 15 por ciento de sus ventas mundiales en dos años y desde el que prevé abastecer a otros mercados de América Latina.
La planta, que ocupa un área de 8.000 metros cuadrados y tiene una capacidad de generación de entre 300 y 400 megavatios anuales, monta turbinas para aerogeneradores de 2 megavatios de potencia y está localizada en el municipio de Camaçarí, en el estado nororiental de Bahía, uno de los polos de energía eólica del país.
"Brasil me parece uno de los mercados más dinámicos del mundo", dijo a la prensa el presidente de Gamesa, Jorge Calvet, durante el acto de inauguración.
El empresario aseguró que la previsión de la compañía es que Brasil suponga entre el 10 y el 15 por ciento de las ventas mundiales de Gamesa en un periodo de dos años.
La fábrica ha supuesto una inversión de 50 millones de reales (unos 31 millones de dólares) y aunque la firma no maneja una cifra concreta de inversión en el país para el futuro, Calvet manifestó la disposición de invertir "de una forma importante" y "cuando haga falta" en función del desarrollo del mercado.
"Gamesa va muy rápido. El mercado brasileño va muy rápido. Hay que ser prudentes pero ambiciosos", destacó Calvet, quien añadió que el objetivo del grupo es colocarse entre los tres primeros fabricantes del sector en el país.
Para Calvet, Brasil supone una "magnífica plataforma de exportación" hacia los mercados próximos, entre los que destacó Chile y Uruguay.
Explicó que la tasa de retorno de los proyectos en Brasil es similar a la de otras partes del mundo y señaló la importancia de la apertura de la fábrica "solamente seis meses después" de anunciar la implantación industrial del grupo en el país.
Durante el discurso inaugural, Calvet subrayó la existencia en Brasil de "un escenario regulador estable, un sólido marco jurídico y económico y medidas incentivadoras para la realización de iniciativas eólicas en el futuro".
Además, dijo que el sector se enfrenta a grandes desafíos como el déficit de electricidad en el mundo, la persistencia de la crisis financiera, el traslado de la demanda a mercados emergentes y el incremento de la competencia.
A la ceremonia, que oficializó el inicio de las operaciones de la planta, que arrancaron el pasado mes de abril, asistieron el gobernador de Bahía, Jacques Wagner; su secretario de Industria, Comercio y Minería, James Correia, y el alcalde Camaçarí, Luiz Caetano.
En su intervención, Correia aseguró que Bahía "se consolida como mercado potencial de la energía eólica de Brasil" y dijo que el actual equipo de gobierno regional trabaja por fortalecer sus vínculos con el sector empresarial.
Precisó que el estado de Bahía está comprometido con la "descentralización del desarrollo" fuera de los núcleos urbanos y añadió que la realidad de la región es que "crece y crece de forma muy diversificada, de la industria automotriz a la energía eólica".
Para el funcionario, la inauguración de la planta, que generará 100 empleos directos, simboliza la entrada de tecnologías.
Mientras, Caetano precisó que las compañías no se están instalando en esa zona "por casualidad", describió la situación actual como una "revolución social" que camina de la mano de la industria y apostilló: "el polo está aquí, efervescente, creciendo".
El grupo Gamesa ganó el pasado año 50 millones de euros, un 56 por ciento menos que en 2009, mientras que las ventas consolidadas alcanzaron los 2.764 millones de euros, lo que supone un retroceso del 14 por ciento, debido al impacto de la crisis financiera en la demanda de 2009 que ralentizó el ritmo de actividad industrial. EFE
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