Redacción de Economía, 4 oct (EFE).- La predisposición de la Reserva Federal estadounidense de poner en marcha nuevas medidas para reactivar la economía, evitó hoy un nuevo descalabro de las bolsas europeas que, no obstante, tuvieron pérdidas por la preocupación que suscita la situación de Grecia y el banco Dexia.
Y es que antes de conocerse que la Reserva Federal está preparada para tomar medidas que ayuden a la recuperación económica, las bolsas europeas registraban pérdidas de más del 3 %.
Una caída que era consecuencia de la preocupación que existía en el mercado por la situación de Grecia y por los efectos que esto puede tener en las entidades financieras, como en el caso del banco Dexia que tiene problemas de liquidez por su exposición a la deuda del país heleno.
Pese a ello, las palabras del presidente de la Reserva Federal (FED), Ben Bernanke, sobre que están preparados para a aplicar nuevas medidas si es necesario, propició la reducción de las pérdidas.
Al final de la sesión, la Bolsa de Milán cayó el 2,72 %; la de París, el 2,61 % y la española, el 1,54 %.
La Bolsa de Londres perdió el 2,58 % y la de Fráncfort, el 2,98 %.
Las bolsas europeas ya comenzaron la sesión de hoy con importantes pérdidas afectadas por la posibilidad de que el banco franco-belga Dexia tenga que volver a ser rescatado por las instituciones públicas por sus problemas de liquidez, consecuencia de su exposición a la deuda griega.
Y ello pese a haber aprobado las pruebas de resistencia a las que se sometió la banca europea y que fueron publicadas el pasado junio y en la que obtuvo una de las mejores calificaciones.
Todos estos datos reactivaban el miedo en los mercados, que conocían poco después que el Gobierno belga iba a celebrar hoy una reunión de urgencia para tratar la situación de la entidad, a la que no dejarán caer ni el gobierno belga ni el francés.
Aunque las miradas se centraron hoy en la situación del banco, los inversores no pasaban por alto la información que llegaba desde Grecia, donde el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, admitió que el país cuenta con fondos hasta mediados de noviembre para cubrir sus obligaciones.
Además, insistió en que puede tener dificultades para cumplir con los objetivos de reducción del déficit.
Por si fuera poco, el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, pronosticó hoy en su última audiencia ante el Parlamento Europeo un "moderado crecimiento del PIB" de cara a los últimos meses de este año.
También la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor's (S&P) rebajó su previsión de crecimiento para la zona del euro en 2012 del 1,5 al 1,1 %.
Durante la sesión, uno de los sectores más castigados ha sido la banca.
En concreto, las acciones de Dexia, que llegaron a perder el 33 %, cerraron con perdidas del 22,46 %.
Barclays también perdió el 7,62 % y Deutsche Bank, el 4,31 %, después de que revisara a la baja sus pronósticos de beneficio para 2011 y de anunciar que prevé reducir 500 empleos en la división de banca de inversión en el cuarto trimestre de 2011 y en el primer trimestre de 2012.
Otra entidad, Lloyd's cayó el 4,95 % y Royal Bank, el 4,14 %.
Por su parte, los bancos franceses, Credit Agricole y BNP Paribas retrocedieron el 6,5 % y el 5,14 %, respectivamente.
Societé Générale también bajó, el 4,9 %, en tanto que los españoles Santander y BBVA perdieron el 1,53 % y el 1,06 %, respectivamente. EFE