San Sebastián, 20 oct (EFE).- El experto en relaciones
internacionales Parag Khanna, asesor del presidente de EEUU, Barack
Obama, ha recomendado hoy a las empresas que apuesten por la
descentralización para ganar posiciones en los mercados emergentes.
Khanna, director del Global Governance Initiative del Foro
Económico Mundial, ha participado hoy en San Sebastián en la primera
jornada del Congreso FARO Internacional 2009, organizado por la
Cámara de Guipúzcoa.
Ante un auditorio repleto de empresarios guipuzcoanos, Khanna ha
expuesto las tesis que contiene su libro "El segundo mundo", en el
que define los equilibrios entre las superpotencias del mundo
globalizado y los países emergentes de todo el planeta.
Ha detallado las características de numerosos mercados
internacionales hacia los que las empresas europeas pueden dirigir
sus miradas en su apuesta por la internacionalización.
Khanna ha abogado por cambiar la mentalidad y abandonar el
esquema de empresas con sedes centrales que disponen de plantas en
el exterior, ya que, a su juicio, en el mundo globalizado las
compañías deben decantarse por un esquema totalmente descentralizado
en el que tengan "20 nodos pero ninguna sede central".
De esta forma, las empresas deben "entender el mercado local" y
"formar a gestores locales" para poder competir con garantías en los
nuevos mercados emergentes.
Según el paradigma que este experto describe en su libro
actualmente existen tres superpotencias mundiales, tres núcleos que
extienden su influencia por todo el mundo: EEUU, que tiene el 20%
del PIB mundial, la Unión Europea, con el 23%, y China, que aunque
cuenta con el 11% del PIB global, sigue creciendo y tiene presencia
en todas las áreas del planeta.
Sobre Japón, el asesor de Obama ha comentado que se ha
considerado tradicionalmente una superpotencia, pero actualmente "ya
no es así" porque "se ha quedado bastante atrás", entre otros
motivos porque sufre "un problema demográfico importante".
Tras estas tres superpotencias, Khanna sitúa a un extenso grupo
de países que integran ese "segundo mundo", que divide en cinco
regiones: la Europa del Este, Asia Central, América Latina, Oriente
Medio y el Sureste Asiático.
Según ha comentado, la industrialización de los países emergentes
puede percibirse como una amenaza para las pymes de las
superpotencias, que deben preguntarse "hasta qué punto quieren
globalizarse" para poder competir. EFE