Bruselas, 5 ago (EFE).- La fiscalía de Gante (oeste de Bélgica),
que investiga las supuestas filtraciones en la tramitación judicial
del "caso Fortis", ha decidido imputar a la magistrada Christine
Schurmans, miembro de uno de los tribunales que intervino en el
proceso.
El diario económico De Tijd adelanta la noticia en su edición de
hoy y recuerda que el esposo de Schurmans, Jan De Groof, mantuvo
frecuentes contactos con el jefe de gabinete del ex primer ministro
belga Yves Leterme durante la crisis del banco Fortis, que fue
intervenido por el Gobierno belga, junto a Holanda y Luxemburgo.
La juez Schurmans formaba parte del tribunal de apelación que en
diciembre del año pasado dio la razón a los accionistas de la
entidad y paralizó su proceso de nacionalización hasta que éstos
fueran consultados.
Schurmans fue la única de los tres magistrados que se mostró
favorable a los puntos de vista del Gobierno en la sentencia.
El Gobierno de Leterme acabó dimitiendo en pleno ante las
sospechas de presiones a los jueces y fiscales encargados de
pronunciarse sobre el "caso Fortis".
La entidad, que fue uno de los grupos de banca y seguros más
grandes de Europa, se hundió en una grave crisis a consecuencia de
las turbulencias financieras y de sus problemas para hacer frente a
la compra de ABN Amro (junto al Santander y el Royal Bank of
Scotland).
Los gobiernos de Bélgica, Holanda y Luxemburgo acometieron una
intervención coordinada del grupo, que acabó dividido.
La mayor parte de la entidad quedó repartida entre el Estado
holandés y el banco francés BNP Paribas.
En Bélgica, donde Fortis era el primer empleador privado del país
y la entidad bancaria líder, los accionistas descontentos con la
gestión de la crisis y con el hundimiento de sus títulos llevaron el
caso a los tribunales. EFE