Nueva York, 11 jul (EFE).- Los miedos a que la crisis de deuda europea se propague a Italia y la posibilidad de que Estados Unidos entre en suspensión de pagos si el Congreso no aprueba incrementar el límite de endeudamiento desencadenaron hoy el peor día de Wall Street en cerca de un mes.
El Dow Jones de Industriales, el índice de referencia del parqué neoyorquino, se dejó esta jornada un contundente 1,2 %, con el que terminó la sesión en las 12.505,76 unidades, su mayor descenso desde principios de junio.
Más pronunciados aún fueron los retrocesos registrados por los otros dos principales índices de Wall Street, el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado tecnológico Nasdaq, con bajadas del 1,81 % y el 2 %, respectivamente.
Los tres indicadores de la principal plaza financiera del mundo iniciaron ya la jornada con descensos cercanos al punto porcentual afectados por el ánimo vendedor reinante en Europa, donde la incertidumbre generada en los mercados ante la posible falta de solvencia de las finanzas de Italia provocó una caída del 3,96 % en la bolsa de Milán.
Esa caída arrastró consigo a otras plazas financieras europeas, de forma que Lisboa cerró con un descenso del 4,28 %, París del 2,71 %, Madrid del 2,69 % y Fráncfort del 2,33 %, entre muchas otras.
La prima de riesgo de Italia, que se mide con el diferencial entre el bono italiano a 10 años y el alemán del mismo plazo, alcanzó hoy la barrera psicológica de los 300 puntos básicos, marcando un nuevo récord desde la entrada del país en el euro.
Lo mismo ocurrió en España, cuya prima de riesgo cerró la sesión en los 335 puntos básicos, el máximo desde la creación del euro en 1999.
Wall Street se vio arrastrado por este día negro para los mercados europeos, aunque detrás de los números rojos de la jornada también tuvieron mucho que ver las dudas sobre la sostenibilidad de las cuentas públicas nacionales ante la falta de acuerdo entre republicanos y demócratas sobre la reducción del abultado déficit de EE.UU.
El presidente Barack Obama aseguró que EE.UU. "nunca ha dejado ni dejará de pagar sus deudas" y enfatizó que se reunirá hoy "y cada día mientras sea necesario" con dirigentes del Congreso hasta que se encuentre una solución en el debate sobre la reducción del déficit y el aumento del techo de empréstito del país.
Ese pacto es cada vez más urgente ya que de no incrementarse el límite de endeudamiento autorizado hasta ahora (14,29 billones de dólares), en unas tres semanas Estados Unidos entraría en una suspensión de pagos sin precedentes.
Los miedos de la jornada golpearon principalmente al sector financiero, que se dejó en su conjunto el 2,45 % arrastrado por descensos como los de Citigroup (-5,33 %), Bank of America (-3,27 %), Morgan Stanley (-3,23 %), JPMorgan Chase (-3,22 %), Wells Fargo (-2,51 %), MasterCard (-2,04 %), Visa (-2,04 %), Goldman Sachs (-1,54 %) y American Express (-1,51 %).
Algunos de los bancos europeos que cotizan en Wall Street también terminaron con pronunciadas caídas: ING (-9,83 %), BBVA (-6,24 %), Deutsche Bank (-6,14 %), Barclays (-5,19 %) y Banco Santander (-4,29 %).
Con ese ánimo vendedor arrancó hoy la temporada de difusión de resultados empresariales en Wall Street, que como es habitual llegó de la mano del fabricante de aluminio Alcoa, que cerró la jornada con un descenso del 2,87 % a la espera de la publicación de esas cuentas.
En las contrataciones electrónicas posteriores al cierre la compañía se dejaba el 0,82 % pese a anunciar que en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal ganó 322 millones de dólares (28 centavos por acción), comparado con los 136 millones (13 centavos por título) del mismo periodo del año anterior. EFE