Y es que el 55% de los encuestados espera un aumento de más del 5% para las acciones del Viejo Continente durante el próximo año debido a la relajación de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) en respuesta al descenso de la inflación, así como a sólidas ganancias.
Además, un 33% considera que reducir la exposición a las acciones demasiado pronto es el mayor riesgo para sus carteras, seguido por un 25% que piensa que el mayor riesgo es no tener suficientes coberturas defensivas.