Madrid, 25 sep (.).- La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha celebrado este lunes la decisión de los países de la Unión Europea (UE) de retrasar de 2025 a 2027 la entrada en vigor de la normativa "Euro 7" para reducir las emisiones contaminantes de los vehículos.
"La orientación general alcanzada hoy en el Consejo de Competitividad representa una aproximación mucho más sensata que la planteada inicialmente por la Comisión Europea", han señalado fuentes de Anfac a EFE.
En este sentido, reconocen la labor de "consenso" del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para elaborar, en el marco de la presidencia española del Consejo de la UE, "un texto de compromiso más equilibrado".
Asimismo, la organización añade que la propuesta inicial, rechazada por ocho países miembros de la UE, era "totalmente desproporcionada y planteaba impactos muy negativos para la industria de automoción española con unos beneficios medioambientales marginales".
El Consejo de Competitividad, formado por los ministros de este ámbito de los países de la UE, ha optado por mantener los límites de emisiones para coches y reducirlos en el caso de los camiones, además de añadir otros para aquellas relacionadas con las partículas de frenos y la tasa de abrasión de los neumáticos.
Por otro lado, los países de la UE han pactado que se retrase la entrada en vigor de la "Euro 7" de 2025 a 2027 en el caso de los vehículos ligeros, y hasta 2029 las exigencias para los pesados.
Una serie de plazos de aplicación que la organización española califica como "viables y realistas", ya que la industria requerirá de inversión y nuevos modelos para poder alcanzarlos, cuando el sector invierte la mayor parte de sus recursos en la descarbonización.
El siguiente paso será que el Parlamento Europeo fije su postura para poder iniciar la negociación inicial sobre la "Euro 7", que Anfac espera que "proporcione certidumbre al sector y permita alcanzar la descarbonización y mantener la competitividad del sector, con vehículos asequibles".
La UE he endurecido progresivamente los límites de emisiones de los vehículos de carretera desde la aprobación de la "Euro 1" en 1992 y tiene previsto que en 2035 se prohíba en todo su territorio la venta de coches nuevos que emitan CO2.