Investing.com - El euro extendió las pérdidas frente al dólar de EE.UU. el martes, cayendo al mínimo de la sesión ya que las preocupaciones sobre las perspectivas de crecimiento mundial y la continua incertidumbre sobre España y Grecia pesaron sobre la confianza del mercado.
El EUR/USD llegó a 1,2891 durante la mañana de EE.UU., el más bajo desde el 03 de octubre, el par se consolidó posteriormente en 1,2890, perdiendo un 0,60%.
El par probablemente encuentre apoyo en 1.2802, la baja del 01 de octubre y la resistencia en 1.2990, el máximo de la sesión.
El sentimiento general del mercado fue alcanzado después de que el Fondo Monetario Internacional redujo su pronóstico para el crecimiento global de este año hasta el 3,3% desde el 3,5%, y advirtió que un fracaso de las autoridades europea y estadounidenses para hacer frente a los problemas actuales podrían poner en peligro lo que dijo era una ya "lenta y desigual " recuperación económica.
El euro seguía bajo presión en medio de la incertidumbre sobre la rapidez con que España podría solicitar formalmente un plan de rescate de la zona euro después de que los ministros de Finanzas dijeron el lunes que Madrid no necesita la ayuda financiera externa todavía.
Los inversionistas también se mantuvieron cautelosos en medio de la actual incertidumbre acerca de si los acreedores internacionales extenderán préstamos a Grecia, mientras el país lucha para cumplir con los objetivos de reducción del déficit.
Horas antes, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que Grecia estaba en un "camino difícil" tras las conversaciones con el primer ministro Antonis Samaras en Atenas, pero agregó que creía que la austeridad sería rentable.
El euro extendía las pérdidas contra la libra y el yen, con el EUR/GBP bajando un 0,37% a 0,8061 y el EUR/JPY cayendo un 0,67% a 100,90.
También el martes, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi reiteró que los gobiernos no pueden confiar en el BCE para solucionar la crisis en la región y dijo que las reformas nacionales eran vitales.
En un testimonio ante el Parlamento Europeo, el Sr. Draghi también advirtió que espera que la actividad económica en la zona euro se mantenga débil, llamandola un "camino largo y cuesta arriba".
El EUR/USD llegó a 1,2891 durante la mañana de EE.UU., el más bajo desde el 03 de octubre, el par se consolidó posteriormente en 1,2890, perdiendo un 0,60%.
El par probablemente encuentre apoyo en 1.2802, la baja del 01 de octubre y la resistencia en 1.2990, el máximo de la sesión.
El sentimiento general del mercado fue alcanzado después de que el Fondo Monetario Internacional redujo su pronóstico para el crecimiento global de este año hasta el 3,3% desde el 3,5%, y advirtió que un fracaso de las autoridades europea y estadounidenses para hacer frente a los problemas actuales podrían poner en peligro lo que dijo era una ya "lenta y desigual " recuperación económica.
El euro seguía bajo presión en medio de la incertidumbre sobre la rapidez con que España podría solicitar formalmente un plan de rescate de la zona euro después de que los ministros de Finanzas dijeron el lunes que Madrid no necesita la ayuda financiera externa todavía.
Los inversionistas también se mantuvieron cautelosos en medio de la actual incertidumbre acerca de si los acreedores internacionales extenderán préstamos a Grecia, mientras el país lucha para cumplir con los objetivos de reducción del déficit.
Horas antes, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que Grecia estaba en un "camino difícil" tras las conversaciones con el primer ministro Antonis Samaras en Atenas, pero agregó que creía que la austeridad sería rentable.
El euro extendía las pérdidas contra la libra y el yen, con el EUR/GBP bajando un 0,37% a 0,8061 y el EUR/JPY cayendo un 0,67% a 100,90.
También el martes, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi reiteró que los gobiernos no pueden confiar en el BCE para solucionar la crisis en la región y dijo que las reformas nacionales eran vitales.
En un testimonio ante el Parlamento Europeo, el Sr. Draghi también advirtió que espera que la actividad económica en la zona euro se mantenga débil, llamandola un "camino largo y cuesta arriba".