El lunes, Bank of America (BofA) puso de relieve posibles vulnerabilidades en las posiciones de divisas tras la publicación de los datos de empleo no agrícola de EE. UU., señalando flujos de inversores moderados antes del anuncio.
El banco indicó que las posiciones largas de los fondos de cobertura en el dólar estadounidense (USD) y el dólar australiano (AUD), así como las posiciones cortas en el dólar canadiense (CAD), podrían estar en riesgo. Además, destacaron las posiciones largas de dinero real en la libra esterlina (GBP) y las cortas en el dólar neozelandés (NZD) por su potencial exposición.
Según BofA, la GBP mostró debilidad, siendo la divisa con peor rendimiento del G10 la semana pasada, con flujos propios del banco muy limitados.
Con el posicionamiento de la GBP en niveles neutrales, BofA sugirió preferir observar señales de nuevas posiciones cortas antes de volver a entrar en posiciones largas de GBP.
En contraste con la GBP, el yen japonés (JPY) experimentó una tendencia positiva en el flujo de opciones. A pesar de los recientes flujos moderados del JPY, BofA informó de un flujo de opciones persistentemente positivo en el JPY, particularmente en el mercado de Derechos Especiales de Giro (SDR).
El banco señaló que la fortaleza en el par USD-JPY más allá de la marca de 160 podría ser autolimitante. BofA continúa favoreciendo una tendencia a la baja en el par EUR-JPY.
En el sector de divisas de mercados emergentes (EM), BofA observó movimientos de flujo más intensos. El banco destacó la continua oferta fuerte del rand sudafricano (ZAR) y una demanda significativa del yuan chino (CNH).
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