Catalina Guerrero
Bruselas, 17 jul (.).- El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, que considera que su país es uno de los más eurocompatibles de América Latina, espera que la Unión Europea y la Celac dejen de lado sus divergencias para construir una relación de futuro mutuamente beneficiosa y advirtió a los 27 sobre el avance de China: "a la madre naturaleza no le gustan las sillas vacías".
"Somos 60 naciones que tenemos que encontrar las áreas de entendimiento común y sí, tratar de saber cuáles divergencias podemos posponer en discusión y cuáles no. Los valores democráticos, desde mi punto de vista, no deben posponerse nunca, ni hoy, ni mañana, ni en 100 años", afirmó Chaves, preguntado por la dificultad de los dos bloques de encontrar un consenso sobre la agresión rusa en Ucrania en su declaración final de la cumbre que celebran hoy y mañana.
El político socialdemócrata, que gobierna el país centroamericano desde mayo de 2022, recordó que él fue uno de los primeros jefes de Estado de la región "en decir claramente que la invasión rusa a Ucrania fue un acto de ilegalidad y hasta cierto punto criminal", lo que le costó una denuncia, posteriormente desestimada, de haber violado la "neutralidad perpetúa" costarricense.
Ahora estamos, dice, ante una situación "muy compleja" porque esta guerra ha liberado "una fuerza que no se puede parar pegando con un objeto que no se puede mover", "que revierte décadas de paz en el continente (europeo) y que tiene implicaciones geopolíticas que van a ser de muchísima trascendencia", cuyo resultado va "a cambiar el mundo para bien o para mal".
Costa Rica lo que ansia es que se alcance la paz, asegura Chaves, que evita pronunciarse sobre si en ese punto apoya el plan del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski: "Esto, la única manera en que se va a resolver es o con un proceso militar prolongado, Dios no quiera, o con la buena fe de ambas partes. Y ambas partes, en el caso de Ucrania, incluye los Estados Unidos y la Unión Europea".
LA UE, CHINA Y LAS SILLAS VACÍAS
La guerra en Ucrania, entre otros desencuentros como la falta de acuerdo en el cierre de acuerdos comerciales con Chile, México o Mercosur, han hecho que la relación entre la Unión Europea y América Latina se haya ido "enfriado", según Chaves, y ha propiciado que en los últimos años haya irrumpido con fuerza en la región China con inversiones y comercio.
"China tiene una cantidad de recursos enorme. ¿Usted sabe que China le ha prestado, no a Costa Rica, nosotros no hemos dependido tanto de ellos, pero a América Latina en general más de lo que le prestan el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial" juntos, por lo que Pekín "se ha convertido en un jugador importante en términos de inversión, en términos de financiamiento y en términos de comercio", constata.
Ante esa realidad, Chaves da la bienvenida al Global Gateway europeo, que invertirá 45.000 millones de euros en proyectos en sectores estratégicos de América Latina, según anunció hoy la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, con la que el presidente costarricense tiene previsto reunirse.
La Unión Europea "sabe que en la geopolítica mundial la madre naturaleza no acepta sillas vacías", manifestó Chaves, al recordar que los 33 países de la Celac engloban a una población de "650 millones de personas, tienen una gran proporción de los bosques del mundo, una altísima proporción del agua del mundo y los minerales que encierran nuestras tierras van a ser fundamentales para la transición energética".
Por eso, porque la relación puede ser mutuamente beneficiosa, el presidente costarricense espera que la relación birregional salga "mejor y más vigorosa" de esta tercera cumbre UE-Celac, trasno celebrarse desde hace ocho años.
"Nunca es tarde cuando la dicha es buena (...) La pregunta relevante siempre es ¿cuál es el siguiente paso? En lugar de ponernos a llorar ya por cosas pasadas, veamos el futuro. Y eso es lo que quiere hacer Costa Rica y yo creo que debería ser toda la Unión Europea y toda América Latina", subrayó.
En lo que a Costa Rica respecta, Chaves espera que la UE, desde un punto de vista comercial, mire a Costa Rica si "es que en realidad Europa quiere poner su dinero donde pone sus palabras. Esa es una demanda muy razonable", dijo al destacar que su país está considerado como uno de los más seguros para invertir, su agricultura está libre de toda deforestación o su energía es cien por cien renovable.
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