Madrid, 21 jul (.).- El Ministerio para la Transición Ecológica ha convocado ayudas por un importe total de 280 millones de euros para proyectos innovadores de almacenamiento energético que contribuyan a mejorar la estabilidad del sistema eléctrico y la seguridad de suministro.
Según ha informado este viernes el Ministerio, las ayudas tienen dos líneas diferenciadas: una para almacenamiento independiente ('stand-alone') y térmico -dotadas con 150 y 30 millones, respectivamente- y otra, de 100 millones de euros, para proyectos de bombeo reversible en centrales hidroeléctricas.
Las subvenciones van con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), y el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) gestionará ambas convocatorias.
La dotación económica de las ayudas dependerá del tamaño de la empresa adjudicataria y de la tipología del proyecto presentado.
Los proyectos destinados al almacenamiento energético por bombeo reversible para optar a las ayudas deberán sumar potencia y capacidad de almacenamiento al sistema energético, tanto a través de nuevas centrales hidroeléctricas reversibles ('greenfield') como de ampliaciones de las existentes ('brownfield'), que incluyan adición de nuevas unidades de bombeo y turbinación.
En concreto, las ayudas contemplan la transformación de centrales hidroeléctricas en centrales de bombeo con adición de depósitos y grupos nuevos, así como el aprovechamiento de los embalses existentes para agregar capacidad de bombeo.
Además, podrá recibir ayudas la hibridación del sistema de almacenamiento por bombeo reversible con otras tecnologías de almacenamiento distintas, siempre que el almacenamiento se conecte a un mismo punto de conexión.
Las solicitudes para esta línea de ayudas podrán presentarse a partir del próximo 22 de septiembre y hasta el 20 de octubre de 2023.
En cuanto a la convocatoria para proyectos innovadores en almacenamiento independiente ('stand-alone') y térmico, ésta financiará dos tipos de actuaciones.
Por un lado, hay una línea dotada con 150 millones para instalaciones 'stand-alone' conectadas a las redes de transporte o distribución de electricidad, que incluye presupuestos específicos para Canarias (15 millones de euros) y Baleares (4 millones).
La segunda línea, dotada con 30 millones de euros, es para almacenamiento térmico (calor sensible, latente o termoquímico) conectado directamente a una instalación de producción de energía renovable que destine la energía final a usos térmicos (calefacción y refrigeración).
El plazo de recepción de solicitudes para estas dos líneas de ayudas permanecerá abierto entre el próximo 20 de septiembre y el 18 de octubre de 2023.
Podrán acceder a las subvenciones empresas, agrupaciones, universidades, centros de investigación o tecnológicos y otras entidades públicas o privadas de carácter no empresarial.
Las ayudas máximas serán de 50 millones por expediente y entidad beneficiaria en las convocatorias para almacenamiento independiente 'stand-alone' y bombeo reversible, y de 6 millones en la de almacenamiento térmico.
Los proyectos tendrán que estar ejecutados antes del 30 de junio de 2026, plazo que se extiende hasta el 31 de diciembre de 2030 en el caso de los de bombeo reversible, según sus características específicas y previa autorización de la Comisión Europea.
En la elección de los proyectos, se valorará su viabilidad económica, innovación técnica, potencial para incrementar el rendimiento energético de las instalaciones o capacidad de ahorrar en el consumo energético primario y final.
También se tendrán en cuenta criterios como el de dotar de estabilidad a la red, facilitar la integración de renovables, y garantizar los suministros y la operación segura del sistema.
Asimismo, se tendrá en cuenta la creación de empleo del proyecto, su contribución al reto demográfico y la transición justa, su impacto en la cadena de valor industrial y la participación de pymes.