Londres, 11 sep (.).- La Cámara de los Lores del Parlamento británico debatió este lunes las conclusiones de un informe sobre la aplicación del controvertido Protocolo para Irlanda del Norte que alerta de la "confusión" que provoca en las empresas el "complejo" régimen comercial que debe cumplir la región británica tras el Brexit.
El parlamentario Michael Hastings, antiguo embajador en Francia, resaltó la "dificultad de resolver estos problemas de manera que queden satisfechas todas las comunidades" de Irlanda del Norte, donde las instituciones de poder compartido entre unionistas y republicanos permanecen bloqueadas.
Tras años de negociaciones, el Gobierno británico pactó en febrero con la Unión Europea (UE) el llamado Acuerdo de Windsor, que suaviza las barreras al paso de mercancías entre la isla de Gran Bretaña e Irlanda del Norte que se levantaron cuando el Reino Unido abandonó el bloque comunitario.
Las empresas de la región han dado la "bienvenida" a ese nuevo texto, que tiene el "potencial de resolver los problemas de manera razonable en el futuro", dijo Hastings, que subrayó al mismo tiempo que "todavía hay trabajo por hacer".
En particular, el parlamentario independiente llamó al Ejecutivo a aportar "mayor claridad" sobre las regulaciones que deben cumplir las compañías y urgió a Londres y Bruselas a elaborar un "sumario completo" de las nuevas regulaciones que incluya tanto las disposiciones del Protocolo original como las modificaciones del Acuerdo de Windsor.
David Frost, que ejerció de negociador del Brexit durante el Gobierno del ex primer ministro Boris Johnson, insistió por su parte en la "falta de claridad" que afrontan las empresas norirlandesas y criticó el acuerdo al que llegó el actual jefe de Gobierno, Rishi Sunak, con la UE.
"Entiendo por qué el primer ministro quería poner fin a las tensiones de los últimos años en Irlanda del Norte, pero siento decir que no comparto la manera cómo lo ha hecho", dijo Frost.
El político conservador, que cuando era negociador del Brexit amenazó en diversas ocasiones con dejar de cumplir los pactos con Bruselas de manera unilateral, declaró hoy que el Acuerdo de Windsor "es la prueba de que no puedes lograr un buen resultado cuando el otro bando sabe que simplemente quieres llegar a un acuerdo".
"Creo que sus beneficios se han exagerado", dijo Frost, que considera que "el nombre puede haber cambiado, pero estamos todavía lidiando esencialmente con el antiguo Protocolo".