Roma, 11 may (.).- El Gobierno italiano destinará 660 millones de euros para facilitar el acceso a la vivienda de los estudiantes universitarios, que han iniciado una ola de protestas en las principales ciudades del país por la escasez de alojamientos y el alto precio de los alquileres.
De norte a sur del país, los estudiantes están acampando en los campus de las universidades para llamar la atención sobre la carestía de los alojamientos, que en algunos casos pueden superar los 700 euros por una habitación en un piso compartido o los 1.300 euros en una residencia.
Este problema se ha situado en el centro del debate político tras el gesto iniciado por Ilaria, una estudiante de ingeniería de 23 años que acampó hace varios días frente al Politécnico de Milán con una pancarta que decía "basta" a los "alquileres insostenibles".
Las imágenes de la tienda de campaña se hicieron virales y han aparecido campamentos en las principales universidades de Italia como La Sapienza de Roma, la Aldo Moro de Bari o la Universidad de Florencia.
Ante el reclamo, la ministra de Universidad e Investigación, Anna Maria Bernini, prometió crear un "grupo de expertos" para analizar el mercado, listar las viviendas vacías y tomar medidas que "garanticen el derecho al estudio".
La primera decisión tomada por el Consejo de Ministros, tras recibir el visto bueno de Bruselas, es una partida de 660 millones de euros que se destinarán "a la adquisición de la disponibilidad de nuevas camas en alojamientos o residencias para estudiantes de instituciones de enseñanza superior".
En su comunicado, el Gobierno no explica si el dinero servirá para financiar alojamientos o para incrementar el parque de viviendas y residencias estudiantiles, muy escaso en Italia, especialmente en ciudades con centros históricos en los que los alquileres turísticos están ganando terreno.
Según una encuesta de Eurostat, en Italia el 68 % de los universitarios viven con sus padres. Además, solo el 5 % alquila una habitación en una residencia pública frente a una media europea del 17 %, recuerda un informe del Consejo Nacional de Estudiantes Universitarios (CNSU).
Esa fuente indica que solo hay 36.000 camas disponibles para una demanda de 764.000 personas, una escasez ya reconocida en los Planes de Recuperación financiados con los fondos europeos de la pandemia y que prevé la construcción de más de 60.000 habitaciones nuevas.
A nivel local, el Ayuntamiento de Florencia ha prometido la apertura de 150 alojamientos universitarios mientras que en Milán el alcalde, Beppe Sala, ha convocado a los rectores universitarios para estudiar medidas sobre los alquileres estudiantiles.