Madrid, 1 sep (.).- La actividad del sector manufacturero español ha registrado en agosto su quinta contracción mensual consecutiva, y la más intensa del año, debido al declive de la producción y los nuevos pedidos, aunque esta situación no ha impactado negativamente en el empleo, según S&P Global.
El índice PMI de actividad del sector manufacturero español del Hamburg Commercial Bank (HCOB), elaborado por S&P Global y publicado este viernes, se situó en 46,5 puntos en agosto, inferior a los 47,8 de julio y a los 50 puntos que separan el crecimiento de la contracción.
El total de nuevos pedidos ha disminuido por quinto mes consecutivo, producido por un entorno de frágil demanda, que ha continuado a la baja y que ha generado, a su vez, una reducción de los niveles de producción.
Esta bajada de la producción, la más acentuada del año, ha ocasionado un ajuste de las existencias en las industrias y un recorte en su compra de insumos por quinto mes consecutivo en agosto.
"Tenemos bastante certeza de que el sector manufacturero ha entrado en una recesión, que comenzó en el segundo trimestre (...), la caída de la industria se ha agudizado, alcanzando cerca del 1 % este trimestre", señala en el informe el economista jefe del HCB, Cyrus de la Rubia.
De acuerdo con la consultora, la falta de ventas ha contribuido a la reducción de los pedidos pendientes, una bajada que se repite por decimoquinto mes consecutivo en agosto, pero a un ritmo más lento que el observado en julio.
Por otro lado, los precios de los insumos soportados por las empresas del sector manufaturero han caído por sexto mes consecutivo.
Pese al descenso del índice, el optimismo de las empresas este mes ha sido el "más robusto" desde febrero de este año, en gran medida por una expectativa de aumento de la demanda, lo que ha motivado un incremento de sus plantillas, las mismas que han aumentado ligeramente por primera vez en tres meses.