Ministro de Hacienda dice que Chile no debe "rendirse" a demandas de la calle

Nueva York, 18 abr (EFE).- El ministro de Hacienda de Chile, Felipe Larraín, afirmó hoy que su Gobierno no debe "rendirse a la tentación" de acceder a las demandas de la calle porque esto impediría alcanzar el objetivo de convertirse en un país desarrollado la próxima década.

"No debemos perder nunca de vista que si nos rendimos a la tentación de responder a las demandas accediendo a todas ellas nunca llegaremos a nuestra meta de ser una nación desarrollada ni a acabar con la pobreza", aseguró Larraín en un encuentro con inversores en la Asociación de las Américas de Nueva York.

El ministro de Hacienda constató cierta "impaciencia" entre la población chilena, que en ocasiones "lo quiere todo y lo quiere ya", pero aseguró que el Gobierno que encabeza Sebastián Piñera es "extremadamente consciente" de las demandas y los desafíos a los que se enfrenta el país.

En ese sentido, Larraín aseguró que si aceptaran las peticiones durante las persistentes protestas en las calles, el país podría caer en la "delicada y peligrosa trampa de la renta media", en la que a su juicio han terminado muchos países que se encaminaban al desarrollo.

Chile vivió entre mayo y diciembre pasados múltiples movilizaciones de universitarios y estudiantes de secundaria en demanda de una enseñanza pública gratuita y de calidad, que incluso incluyeron prolongadas ocupaciones de cientos de centros educativos.

"Somos extremadamente conscientes de que tenemos muchos desafíos en educación, estamos trabajando mucho en reducir el coste de los préstamos a estudiantes y aumentar el número de becas o la cobertura de la educación preescolar", explicó Larraín.

A las protestas estudiantiles se sumó también el mes pasado el conflicto que vivió la región sureña de Aysén por el aislamiento que sufre del resto del país, que se traduce en problemas de conectividad, educación y altos precios de combustibles y otros productos.

Pese a los desafíos, el ministro de Hacienda hizo hincapié en el buen comportamiento de la economía, cuyo producto interior bruto (PIB) creció el 5,5 % en enero y el 6,1 % en febrero, por encima de la media del 3,5 % que se prevé que crezca de media la economía mundial en el conjunto de 2012.

Larraín, que se encuentra en Estados Unidos para acudir a la reunión de ministros de Finanzas del G20 que se celebrará el viernes en Washington, reiteró que el objetivo de crecer el 5 % este año es "muy ambicioso" debido al empeoramiento de la economía mundial de los últimos meses.

Por ello, Larraín afirmó que crecer por encima del 4 % este año "sería muy bueno" y confió que en 2013 esa cifra sea mejor, aunque recordó que "estamos en un escenario complicado", debido a la crisis en Europa, destino del 19,8 % de las exportaciones de Chile, así como la ralentización de China, que supone otro 22,8 %.

El titular de Hacienda chileno destacó la situación del mercado laboral, donde la tasa de desempleo se redujo al 6,4 % en febrero, así como la estabilidad de sus cuentas públicas y los niveles de inversión en la mayor parte de las zonas del país, no solamente en aquellas que se vieron afectadas por el terremoto de 2010.

Larraín dijo que puede que su país vuelva a los mercados internacionales para captar más capital, aunque admitió que probablemente esto no ocurrirá hasta el año que viene tras haber emitido más de 2.000 millones de dólares en bonos soberanos en los últimos dos años. EFE