Madrid, 20 dic (.).- El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha dado este martes su apoyo a la implantación de un sistema de etiquetado en la Unión Europea (UE) que diferencie la calidad de productos de la dieta mediterránea como el aceite de oliva.
Durante su participación en la entrega de los premios Evooleum, Planas se ha referido a la legislación que afecta al sector y ha asegurado que la nueva normativa europea de etiquetado de alimentos "puede favorecer" al aceite de oliva español.
La Comisión Europea debe presentar su propuesta de etiquetado frontal y esta será previsiblemente objeto de discusión durante la Presidencia española de la UE, en la segunda mitad de 2023.
"Tenemos que conseguir un sistema armonizado de uso voluntario para los operadores que permita diferenciar la calidad de los productos de la dieta mediterránea", entre los que se incluye el aceite de oliva, ha expresado Planas.
El ministro también ha mencionado las posibilidades que ofrece para el sector la nueva Política Agraria Común (PAC) que se aplicará a partir del año que viene, concretamente en los capítulos de ayudas directas y desarrollo rural, y que contiene cuatro medidas vinculadas al olivar.
En cuanto a los ecorregímenes, ayudas vinculadas a prácticas ambientales sostenibles, ha destacado las cubiertas vegetales, que aumentan la fertilidad y la biodiversidad, y reducen la erosión.
Planas ha mostrado su preocupación por el olivar de secano de baja producción, para el que el Gobierno está diseñando una nueva medida específica, debido a su valor económico y social en muchas localidades.
Su departamento está igualmente trabajando en la planificación de la cosecha temprana y estudiando los requerimientos para tres medidas más, como son el rendimiento de extracción de aceite de la pasta de aceituna, la limitación del rendimiento básico de aceituna por hectárea a nivel de parcela y el etiquetado obligatorio de modelos de producción.
Ha vuelto a llamar a la responsabilidad de toda la cadena para moderar los precios del aceite de oliva en la presente campaña, reducida a unas 780.000 toneladas, lo que ha llevado a un incremento de las cotizaciones.