Viena, 30 ago (.).- Bucarest ha solicitado a la Comisión Europea (CE) que acepte que el déficit fiscal rumano sea este año del 5,5 % del PIB, en lugar del 4,4 % previsto inicialmente, dados los gastos extraordinarios generados por la invasión rusa de Ucrania, pero Bruselas exige aún una serie de medidas de ahorro.
Según informa este miércoles la emisora Digi24, el ministro de Finanzas rumano, Marcel Bolos, viajó a la capital belga a principios de esta semana para iniciar unas negociaciones antes de que el primer ministro, Marcel Ciolacu, se reúna con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en los próximos días.
Rumanía se había comprometido a rebajar gradualmente su déficit hasta dejarlo por debajo del umbral del 3 % en 2024 pero, según el Gobierno de socialdemócratas y liberales, el país se ha alejado de ese objetivo debido a los gastos generados por la guerra en Ucrania y la crisis energética.
El Gobierno rumano necesita aprobar el próximo mes un presupuesto con una contención del déficit fiscal que obtenga la luz verde de Bruselas para seguir recibiendo las ayudas de los fondos comunitarios de desarrollo y recuperación.
"He presentado el plan de medidas fiscales y recortes de gastos presupuestarios", dijo Bolos a su regreso de Bruselas, según recoge Digi24 en su web.
El ministro explicó que el gasto fiscal se ha disparado sobre todo por el aumento del presupuesto de defensa, las medidas adoptadas para topar los precios de la energía y los costes de la acogida de refugiados de Ucrania, de tal forma que es "casi imposible" no superar el 4,4 % del producto interior bruto (PIB).
Para Rumanía, un objetivo "justo" para este año sería el de un déficit del 5,5 %, insistió.
Según Digi24, la CE "no quedó convencida y pidió a Rumanía nuevas medidas para aportar dinero al presupuesto".