Madrid, 5 sep (.).- Sedigas considera que el objetivo de biometano de la actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) es poco ambicioso, pues cree que España debe aspirar a un mínimo de producción de entre 35 y 47 teravatios hora (TWh) en 2030, al tiempo que reclama una mayor concreción en el desarrollo del hidrógeno renovable.
La patronal gasista ha indicado este martes que ha presentado una serie de alegaciones al texto inicial de la revisión del PNIEC propuesto por el Gobierno de España.
Sedigas cree que el objetivo de producción de biometano en la mezcla de gases para 2030 debe ser de al menos 35 TWh, frente a los 20 TWh de producción de biogás que se propone en el documento del Ejecutivo actualmente en consulta.
Ese mínimo de entre 35 y 47 TWh de biometano en 2030 es equivalente hoy a entre el 10 % y el 13 % de la demanda anual de gas de 2022, según Sedigas, que dice que el biometano puede contribuir significativamente a alcanzar la descarbonización al menor coste posible, especialmente con la inyección en la red de este gas renovable.
Según Sedigas, ésta sería la opción de consumo más eficiente, pues posibilita que el biometano sea suministrado a un mayor número de clientes y aprovechar las infraestructuras ya existentes, que no necesitan adaptación para acoger este gas.
Por eso, no entiende que el PNIEC valore de forma más positiva el consumo 'in situ', aquel que no es distribuido aprovechando la red gasista.
En cuanto al hidrógeno renovable, opina que en la actualización del PNIEC falta concreción en elementos que son fundamentales para su desarrollo, algo que podría afecta a su viabilidad y despliegue efectivo.
Sedigas considera que esa concreción podría ser recogida en la actualización de la Hoja de Ruta del Hidrógeno Renovable para que contemple un escalado a 2040 y una visión para 2050.
La asociación pide que se mantenga el objetivo de 11 gigavatios (GW) de electrolizadores para 2030 que recoge la actualización del PNIEC frente a los 4 GW contemplados ahora en la Hoja de Ruta del Hidrógeno.
Además, dice que el documento del Gobierno para la revisión del PNIEC no considera el 'blending' (mezcla) de gas natural e hidrógeno renovable, cuando sería una solución para la descarbonización eficiente del sector gasista y para que se desarrolle una economía del hidrógeno, por lo que cree imprescindible que el 'blending' se contemple en el PNIEC.
Sedigas ha reiterado también que es necesario reconocer el "valor estratégico" de los ciclos combinados como pilar de la seguridad energética en un entorno de alta penetración de energía renovable no gestionable.
Según la patronal gasista, el mantenimiento en la revisión del PNIEC de la potencia instalada de ciclos combinados de gas para 2030 en 26,6 GW es una prueba del papel fundamental que esta tecnología seguirá teniendo para garantizar el suministro eléctrico en el horizonte de 2030.
Sedigas dice que la inclusión de los ciclos en las previsiones de la futura matriz energética debe ir acompañada del desarrollo de mecanismos de mercado que permitan su viabilidad económica y, en caso de no ser ésta posible, se debe facilitar su libre salida del mercado.
La asociación también considera necesarias medidas nacionales adicionales que garanticen la seguridad del suministro eléctrico y fijar un sistema de retribución para las infraestructuras asociadas a los ciclos combinados.
Sedigas recuerda que en los meses de junio, julio y agosto la aportación media de los ciclos combinados alcanzó el 21,4 % del total de la generación eléctrica nacional.
La patronal gasista también considera que las calderas de gas pueden seguir siendo una opción para la descarbonización en el sector de al edificación, pues ya las hay preparadas para ser compatibles con el uso de biometano e hidrógeno renovable, y recuerda que la opción de la bomba de calor está condicionada por la ubicación geográfica del inmueble y las necesidades de calefacción que haya.