Por Nita Bhalla
BHOPAL, India (Reuters) - Cientos de personas se manifestaron en la ciudad india de Bhopal el martes, portando antorchas para recordar a los miles de fallecidos en el mayor desastre industrial del mundo y en demanda de justicia para los supervivientes que continúan sufriendo tres décadas después.
En las primeras horas del 3 de diciembre de 1984, unas 40 toneladas métricas del gas tóxico isocianato de metilo se filtraron accidentalmente de una fábrica de pesticidas propiedad de la multinacional estadounidense Union Carbide Corp y fue llevada por el viento hasta los barrios pobres cercanos.
El Gobierno registró 5.295 muertes. Los activistas estiman que 25.000 personas han muerto de enfermedades en los años siguientes. Muchos más, dicen, se enfrentan al cáncer, la ceguera, dificultades respiratorias y desórdenes inmunes y neurológicos, pero sin apoyo.
"Estamos aquí para demandar nuestros derechos al Gobierno indio y a Union Carbide", dijo Kamla Bhai, de 70 años, mientras caminaba junto a otros supervivientes, activistas y simpatizantes a través de las bulliciosas calles de Bhopal hasta el lugar donde se encuentra la fábrica abandonada.
"Perdimos a nuestros hijos, perdimos a nuestros maridos, perdimos a nuestras madres, perdimos a nuestros padres, hasta ahora hemos sido ignorados por el Gobierno y engañados por la corporación durante los últimos 30 años. Su trato ha sido vergonzoso".
Bhai, cuyo marido murió de cáncer cinco años después del accidente, dijo que los supervivientes necesitaban cuidados sanitarios y compensación financiera, mientras que una segunda y tercera generación de niños con malformaciones congénitas necesitaba un tratamiento médico especial.
Otros en la manifestación pidieron la limpieza de miles de toneladas de residuos tóxicos, enterrados por la compañía dentro y fuera de la planta. Los residuos se han introducido en el suelo y envenenado el agua para beber de las 50.000 personas que viven alrededor de la zona.
DENUNCIAS FALSAS
El Gobierno del estado de Madhya Pradesh, donde se ubica Bhopal, ha dicho que el Tribunal Supremo decide quiénes son los beneficiarios elegibles para la compensación y los tratamientos sanitarios gratis.
"Todas las personas afectadas han sido enumeradas y esto se ha presentado ante el Tribunal Supremo y el tribunal ha decidido, después de un examen extenso de sus casos, qué se va a pagar y a quiénes", dijo Pravir Krishn, el responsable de la oficina del estado que se encarga de la ayuda y la rehabilitación para las víctimas de Bhopal.
Krishn dijo que algunas familias pobres que buscaban compensaciones por enfermedad o ayudas médicas para sus niños discapacitados, que sufrían enfermedades como parálisis cerebral y distrofia muscular, no procedían de las ubicaciones contaminadas, sugiriendo que se habían atribuido falsamente ser víctimas de la tragedia.
Dijo que el estado había ofrecido 40.000 millones de rupias (527 millones de euros) a 575.000 personas identificadas por el Tribunal Supremo como afectados por el desastre, seis hospitales avanzados y ofrecido casas a muchas víctimas.
La compañía estadounidense Dow Chemical, que ahora es propietaria de Union Carbide, ha negado tener obligaciones y ha dicho que compró la empresa hace una década, después de que Union Carbide zanjara sus deudas con el Gobierno indio en 1989 con el pago de 470 millones de dólares (381 millones de euros).
Los activistas dicen que es una suma miserable basada en una valoración bruta demasiado baja del sufrimiento humano causado por la catástrofe.