MADRID (Reuters) - El diputado y portavoz de Nueva Canarias en el Congreso, Pedro Quevedo, se mostró el jueves abierto a negociar con el Gobierno del Partido Popular su respaldo a los presupuestos de 2017, un voto que podría ser clave para sacar adelante las cuentas de este año.
Quevedo expresó su disposición a hablar con el PP para desbloquear "algo muy grave" y evitar la prórroga de los presupuestos del año pasado, que calificó de "malísimos", aunque advirtió de que no darían el "sí" a cambio de "una propina".
"Nosotros lo que no vamos a hacer es suicidarnos (...) Si hay una negociación de presupuestos que lo que pretende, con un poquito de propaganda y alguna especie de propina, es modificar nuestra posición, le puedo asegurar que se van a encontrar con un 'no'", dijo en la Cadena Cope.
Ante el rechazo del PSOE a apoyar las cuentas públicas, un eventual acuerdo con el diputado de Nueva Canarias se sumaría a los posibles pactos del PP con Ciudadanos, Partido Nacionalista Vasco y Coalición Canaria, que en cualquier caso aún están sin cerrar.
Si prosperasen todas estas negociaciones, los presupuestos generales del Estado, -que el Gobierno de Mariano Rajoy quiere llevar al Congreso a finales de marzo o principios de abril-, alcanzarían los 176 votos, que marcan la mayoría absoluta en una cámara con 350 representantes.
Nueva Canarias se presentó a las elecciones generales en coalición con el PSOE, aunque está integrado en el Grupo Mixto.
Quevedo dijo que había informado a los socialistas de su decisión de negociar con el PP, y admitió que parte del PSOE podría ver con buenos ojos su voto positivo a los presupuestos para quitar presión a un partido aún inmerso en una crisis de liderazgo.
"Es evidente que en una situación dura como la que estamos, en la que el PSOE tiene dificultades para moverse con claridad en un sentido u otro, probablemente no esté mal que alguien desbloquee algo muy grave", dijo Quevedo.
El diputado canario quiso reservarse para la negociación su lista de reivindicaciones, pero dijo que Canarias había sido "sobremaltratada" en los últimos presupuestos y defendió la necesidad de cambiar la ley electoral en las islas por considerar "un disparate" su actual proporcionalidad.