Por Pablo Rodero
(Reuters) - España expulsó el jueves de vuelta a Marruecos a 116 migrantes, todos los que lograron la víspera saltar la valla fronteriza con Ceuta excepto dos menores, en virtud de un acuerdo bilateral de 1992 aplicado en muy pocas ocasiones hasta la fecha, dijo un portavoz del Ministerio del Interior.
Un grupo de 300 personas intentó entrar en territorio español el miércoles en un nuevo salto de la valla fronteriza de Ceuta, donde los inmigrantes utilizaron materiales que provocaron quemaduras a siete guardias civiles.
La Policía española identificó el miércoles a los 116 inmigrantes y les prestó asistencia letrada y sanitaria antes de abrir expedientes de expulsión, que fueron aceptados por los migrantes, según el portavoz de Interior.
El portavoz añadió posteriormente que los expulsados fueron informados de que tenían derecho a solicitar asilo político en España, pero ninguno optó por iniciar el trámite.
España ha sido criticada por grupos en defensa de los derechos humanos en los últimos años por realizar devoluciones en caliente a Marruecos, enviando a migrantes recién llegados de vuelta al país africano sin llevar a cabo los procedimientos legales y privándoles de solicitar asilo político.
El año pasado, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, sentenció que una devolución en caliente de migrantes subsaharianos en Melilla contravino el Convenio Europeo de los Derechos Humanos.
La ONG Amnistía Internacional mostró su preocupación ante la actuación del Gobierno el jueves.
"Nos preocupan gravemente estas prácticas porque podrían suponer una violación de derechos humanos de las personas migrantes y posibles solicitantes de asilo", dijo Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España, citado en un comunicado.
Marruecos aceptó el mismo día del salto la devolución de los 116 migrantes por un acuerdo firmado entre España y Marruecos hace 26 años en el que ambos estados se comprometían a aceptar las devoluciones de personas que hubieran cruzado de forma ilegal a sus territorios.
El acuerdo se ha puesto en marcha en esta ocasión por las "buenas relaciones bilaterales" actuales entre ambos países, según el portavoz de Interior español.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y la canciller alemana, Angela Merkel, insistieron este mes en la necesidad de llegar a acuerdos e intensificar la cooperación con los países de origen y con Marruecos y Túnez.
España es uno de los focos de atención de la inmigración en la Unión Europea, en cuyo seno se siguen produciendo grandes diferencias respecto a la gestión de los flujos migratorios.
(Información de Pablo Rodero, editado por Rodrigo de Miguel)