BUDAPEST, 4 abr (Reuters) - La omnipresente publicidad gubernamental pagada por el Estado húngaro dio al partido gobernante Fidesz del primer ministro Viktor Orbán una ventaja indebida en el período previo a las elecciones parlamentarias del domingo, que dio a Orbán un cuarto mandato consecutivo, dijo el lunes el monitor electoral de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Desafiando unos sondeos que apuntaban a unos comicios ajustados, el nacionalista Orbán se anotó otra victoria aplastante, después de que los votantes respaldaran su visión de un Estado conservador y "antiliberal" y se desentendieran de las preocupaciones por los estrechos vínculos de Budapest con Moscú.
Los resultados preliminares, con el 99% de los votos escrutados, mostraron que el partido Fidesz de Orbán obtuvo 135 escaños en el parlamento de Hungría, de un total de 199 miembros, mientras que una alianza de partidos de la oposición se hizo con tan solo 56 escaños y el partido de extrema derecha Nuestra Patria con 7 escaños.
La OSCE afirmó en un comunicado que el proceso electoral estuvo bien dirigido y fue competitivo. Sin embargo, dijo que el proceso se vio empañado por lo que calificó de solapamiento generalizado de los mensajes del Gobierno y de la coalición gobernante, así como por la parcialidad de los medios de comunicación y la opacidad de la financiación de la campaña.
"La misión de observación observó que las campañas publicitarias generalizadas del Gobierno, pagadas con el presupuesto del Estado, reforzaron los principales mensajes de la campaña del partido gobernante, proporcionando una ventaja indebida", dijo.
"La propia campaña se caracterizó por un solapamiento generalizado entre los mensajes de la campaña de la coalición gobernante y las campañas de información del Gobierno, lo que amplió la ventaja de la coalición gobernante y difuminó la línea entre el Estado y el partido".
"Cualquier credibilidad que le quedara a la OIDDH (Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos) de la OSCE ha desaparecido", escribió en redes sociales el portavoz del Gobierno húngaro, Zoltan Kovacs, en respuesta al informe, desestimando sus críticas a la ventaja mediática de Fidesz.
El líder de la oposición, Peter Marki-Zay, también culpó al dominio mediático del Fidesz como un factor clave de la derrota electoral.
Preguntado por si, basándose en sus observaciones, los comicios del domingo pueden considerarse libres, Mark Pritchard, jefe de la delegación de la Asamblea Parlamentaria de la OSCE, se negó a emitir tal juicio.
"Nuestro tiempo aquí es para evaluar el proceso de cómo se llevaron a cabo las elecciones (...). Nuestro papel aquí es sólo observar, analizar lo que vemos a partir de nuestras observaciones (...), así que no es para comentar las elecciones en sí".
(Reporte de Anita Komuves y Gergely Szakacs; edición de Tomasz Janowski; traducción de Darío Fernández)