Por Gleb Garanich y Natalia Zinets
BUCHA/LEÓPOLIS, Ucrania, 25 mar (Reuters) -Moscú afirmó el viernes que está reduciendo sus ambiciones en Ucrania para centrarse en el territorio reclamado por los separatistas respaldados por Rusia, mientras las fuerzas ucranianas pasaban a la ofensiva para recuperar ciudades en las afueras de la capital, Kiev.
En la primera gran señal de que las sanciones occidentales a Moscú están afectando a las inversiones de China, fuentes dijeron que el grupo estatal Sinopec (NYSE:SHI), el mayor refinador de petróleo de Asia, interrumpió las conversaciones sobre una inversión petroquímica y una empresa para comercializar gas ruso.
En el mes transcurrido desde que lanzaron su invasión de Ucrania, las tropas rusas no han logrado capturar ninguna ciudad importante. Su asalto se ha topado con la dura resistencia de las fuerzas del presidente Volodímir Zelenski y se ha detenido a las puertas de Kiev.
Los rusos, en cambio, han bombardeado y rodeado las ciudades, asolando zonas residenciales y expulsando de sus hogares a una cuarta parte de los 44 millones de habitantes. Más de 3,7 millones de ellos han huido al extranjero, la mitad a Polonia, país que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, visitaba el viernes.
Las líneas de batalla cerca de Kiev llevan semanas congeladas, con dos columnas principales de blindados rusos atascadas al noroeste y este de la capital. Un informe de la inteligencia británica se refirió a una contraofensiva ucraniana que había hecho retroceder a los rusos en el este.
"Los contraataques ucranianos y el retroceso de las fuerzas rusas en sus líneas de suministro han permitido a Ucrania reocupar ciudades y posiciones defensivas hasta 35 kilómetros al este de Kiev", decía la actualización. Londres ha proporcionado a Ucrania armas y entrenamiento militar.
En un anuncio que parecía indicar objetivos más limitados, el Ministerio de Defensa ruso dijo que una primera fase de su operación se había completado en su mayor parte y que ahora se centraría en "liberar" la región separatista oriental de Dombás.
"El potencial de combate de las Fuerzas Armadas de Ucrania se ha reducido considerablemente, lo que (...) permite centrar nuestros esfuerzos centrales en la consecución del objetivo principal, la liberación de Dombás", dijo Sergei Rudskoi, jefe de la Dirección Operativa Principal del Estado Mayor ruso.
TROPAS NO PREPARADAS
Una alta fuente diplomática en Moscú describió el anuncio como un posible preludio de una desescalada. "Sus objetivos de guerra son/eran mucho más amplios que Dombás, dejando su fuerza dividida con ataques mal coordinados en múltiples frentes por tropas no preparadas", dijo la fuente.
Naciones Unidas dijo que confirmó 1.081 muertes de civiles y 1.707 heridos en Ucrania desde la invasión, añadiendo que el número real de víctimas es probablemente mayor.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que 1.351 soldados rusos habían perecido y 3.825 habían resultado heridos, según la agencia de noticias Interfax. Ucrania afirma que han muerto 15.000 soldados rusos.
Volodímir Borysenko, alcalde de Borispol, un suburbio del este donde se encuentra el principal aeropuerto de Kiev, dijo que 20.000 civiles abandonaron la zona en respuesta a un llamado de desalojo para que las tropas ucranianas pudieran hacer retroceder a los rusos.
Las fuerzas ucranianas reconquistaron un pueblo a las tropas rusas el día anterior y habrían seguido avanzando pero se habían detenido para no poner en peligro a los civiles, afirmó.
En el otro frente principal de las afueras de Kiev, al noroeste de la capital, las fuerzas ucranianas han intentado rodear a las tropas rusas en los suburbios de Irpín, Bucha y Hostomel, reducidos a ruinas por los intensos combates.
En Bucha, a 25 kilómetros al noroeste de Kiev, un pequeño grupo de tropas ucranianas armadas con misiles antitanque estaba cavando trincheras. Andriy dijo a Reuters que se había alistado para defender la ciudad en cuanto comenzó la invasión.
"Le dije a mi mujer que agarrara a los niños y se escondiera en el sótano, y fui al puesto de reclutamiento y me alisté en mi unidad enseguida", afirmó.
Moscú califica sus acciones en Ucrania de "operación militar especial" para desmilitarizar y "desnazificar" a su vecino. Kiev y Occidente dicen que el presidente ruso, Vladimir Putin, lanzó una agresión no provocada. Al no poder capturar ciudades, Rusia las está golpeando con artillería y ataques aéreos.
El puerto oriental de Mariúpol, una ciudad de 400.000 habitantes, ha sido el más afectado. Es la mayor ciudad en manos de Ucrania en el territorio que Rusia exige que se ceda a los separatistas.
Se cree que decenas de miles de personas siguen atrapadas sin apenas acceso a alimentos, electricidad o calefacción, mientras la ciudad ha quedado reducida a ruinas.
El ayuntamiento de Mariúpol dio el viernes por primera vez una cifra estimada de muertos por el bombardeo del teatro principal el 16 de marzo, diciendo que los testigos hablan de 300 fallecidos entre los cientos de personas que se refugiaban en el sótano.
Naciones Unidas dijo que está investigando los informes sobre fosas comunes en Mariúpol, incluida una con al menos 200 cadáveres.
(Reporte de un periodista de Reuters en Mariúpol, Natalia Zinets en Leópolis y las oficinas de Reuters en todo el mundo; escrito por Peter Graff y Nick Macfie; editado en español por Carlos Serrano)