Por Stephane Mahe y Ingrid Melander
SPEZET, Francia, 5 abr (Reuters) - La líder de la extrema derecha francesa Marine Le Pen, que ha reducido la distancia con Emmanuel Macron en los sondeos de opinión antes de las elecciones presidenciales del domingo lo suficiente como para hacer temblar a los mercados, trataba el martes de mejorar su imagen a pocos días de la votación.
El mandatario, por su parte, salió a recorrer una pequeña ciudad del noroeste de Francia, estrechando manos, abrazando a la gente y sonriendo a las multitudes que gritaban "¡Macron presidente!", en su intento de reactivar una campaña deslucida que comenzó mucho más tarde que su rival.
Le Pen, a quien Macron venció fácilmente con dos tercios de los votos hace cinco años, se ha acercado tanto a su rival que el resultado de una probable segunda vuelta el 24 de abril está ahora dentro del margen de error, mostró una encuesta el lunes.
Desde su estrepitosa derrota de 2017, Le Pen ha trabajado pacientemente en mejorar su imagen, esforzándose por aparecer como una dirigente potencial en lugar de una opositora radical antisistema.
Las encuestas muestran que esto ha funcionado en un número creciente de votantes, con una encuesta que dice que la otrora vilipendiada candidata se ha convertido en el segundo político más querido del país, algo que durante mucho tiempo se creyó imposible en Francia.
"Siempre intento tener la visión más razonable posible y que defienda el interés de Francia", dijo Le Pen en una entrevista con la radio France Inter, explicando sus puntos de vista sobre temas que van desde la política exterior al cambio climático.
Sin embargo, el índice CAC-40 de Francia caía con fuerza el martes en medio de la incertidumbre electoral. [L6N2W304U]
Le Pen ha seguido mejorando en los sondeos previos a la primera vuelta, con un 23% de las preferencias frente al 27% de Macron, según un sondeo de OpinionWay y Kéa Partners para el diario Les Echos y Radio Classique.
El sondeo también muestra que el 59% de los encuestados espera que Macron gane un segundo mandato, algo que todos los sondeos de opinión siguen señalando como el escenario más probable.
El presidente pasó horas hablando con los votantes en la plaza principal de la ciudad bretona de Spezet, tomándose selfies entre vítores y un puñado de abucheos.
Macron centró un discurso en lo crucial que es Europa para Francia, y criticó, sin nombrarla, el euroescepticismo de Le Pen, destacando su propia experiencia como estadista.
"Los proyectos que dan la espalda a Europa son dañinos y mortales para nuestro futuro", dijo, concluyendo con un rotundo: "¡Viva Francia y viva Europa!".
Aunque ha renunciado a los planes de abandonar el euro o la UE, que habían disuadido a muchos votantes de apoyarla en las pasadas elecciones, Le Pen ha mantenido una postura euroescéptica, dando preeminencia a la legislación francesa, y hablando de sustituir el bloque por una "Alianza Europea de Naciones".
(Información adicional de Julien Ponthus, Sudip Kar-Gupta; escrito por Ingrid Melander. Editado en español por Javier Leira)