México, 26 mar (EFE).- El presidente de México, Felipe Calderón,
declaró hoy que su país tiene "un problema de percepción y de
imagen" que afecta al sector turístico y en el que influyen las
recriminaciones "de los propios mexicanos" en cuanto a la
inseguridad ciudadana.
"México es satanizado y recriminado por su propia problemática
por los propios mexicanos", expresó.
El mandatario recordó en un encuentro sobre turismo en la capital
mexicana que Brasil, "teniendo el doble de homicidios" que México,
"se lleva la Copa del Mundo (2014) y los Juegos Olímpicos (2016)".
"Jamás en mi vida profesional o como presidente de la República
he escuchado a un brasileño hablar mal de Brasil. Y, en nuestro
caso, hay que hablar bien de México", proclamó.
Calderón citó un informe del estadounidense Brookings Institute
que afirma que en México hay 11,5 homicidios por cada 100.000
habitantes, y aseguró que muchas zonas del país tienen "tasas de
criminalidad equiparables a las de algunos estados de la Unión
Europea".
"Sí, tenemos un problema de inseguridad, pero también hay que
poner en perspectiva las cosas y hablar bien de México", sentenció.
"Tenemos que promover a México y su imagen de manera integral, no
sólo sobre pirámides y playas", puntualizó.
Desde hace tres años, cuando el Gobierno mexicano le declaró la
guerra al narcotráfico, el crimen organizado se ha cobrado unas
18.000 vidas en el país.
Recientemente, enclaves turísticos como Guerrero, donde se
encuentra Acapulco, se han visto envueltos en la guerra que los
carteles mantienen entre sí y contra las autoridades.
Fortalecer el turismo, tercera fuente de ingresos del país es una
de las metas de Calderón, quien a principios de este mes sustituyó
al hasta ahora secretario (ministro) en la materia, Rodolfo
Elizondo, por Gloria Guevara, especialista en el sector.
Guevara, a quien Calderón también ha nombrado recientemente
directora del Consejo de Promoción Turística mexicano, recordó en el
evento que sus prioridades en el cargo serán "impulsar la imagen
exterior del país, facilitar las inversiones nacionales y
extranjeras en el sector y promover zonas turísticas sostenibles a
nivel nacional".
El mandatario mexicano señaló que "si se hace adecuadamente la
tarea en el turismo", en el primer trimestre del año se alcanzarán
los 250.000 empleos nuevos en México.
La crisis económica mundial del pasado año redujo "de forma
drástica los niveles de consumo del mayor mercado de visitantes
turísticos a México", el de Estados Unidos, y la aparición de la
gripe A redujo el nivel de ocupación hotelera nacional "hasta un
treinta por ciento" en mayo, detalló el gobernante.
Para revitalizar el sector y convertir a México en potencia
turística mundial, Calderón anunció que el Ejecutivo emprenderá una
desregulación en toda la economía pero, en especial, en el turismo.
"Todo trámite innecesario tiene que desaparecer", dijo el
mandatario.
Entre otros cambios, para acceder a México ya no se exigirá
visado a los turistas que tengan el de Estados Unidos, dijo.
Calderón se refirió también a las obras de mejora en la
infraestructura de transportes, que incluyen la construcción de un
nuevo aeropuerto en Rivera Maya y otro en el Mar de Cortés, además
de la ampliación del de Cancún y de otros veintiséis más. EFE
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