Números mixtos en las bolsas europeas desde la apertura, que no han variado demasiado. El Ibex 35 es el que más está cayendo, levemente castigado por el triunfo de Pedro Sánchez ayer en las elecciones primarias del PSOE, lo que hace aumentar el potencial de inestabilidad política, dada su previsible oposición a colaborar con el Gobierno, acercando la posibilidad de que haya que celebrar elecciones anticipadas al no poder concluirse la legislatura.
La deuda española también refleja con moderación este incremento de la inestabilidad, precisamente una de las cuestiones que habían llevado a que el Ibex 35 fuese el mejor índice de Europa en lo que llevamos de año. Tal vez, esa ventaja táctica se matice mucho en los próximos meses.
Por lo demás, tenemos que Wall Street hizo un ejercicio de fortaleza recuperándose desde los mínimos del pasado jueves. El viernes, los selectivos estadounidenses cerraron con claras subidas. El Dow Jones se anotó un 0,69%, el S&P 500, un 0,67%, y el Nasdaq, un 0,47%.
No hay novedades con la Comisión de Investigación que se ha formado sobre el Russiagate, por lo que el mayor optimismo que han reflejado los inversores en las últimas horas, no tiene gran justificación. Probablemente, la fuerza del fondo del mercado es demasiado potente como para doblegarse con las informaciones que han aparecido hasta la fecha. Pero, sin duda, un nuevo catalizador está sobre la mesa, con un potencial bajista muy importante.
Tampoco ha generado ningún tipo de nervios el nuevo lanzamiento de un misil balístico por parte de Corea, ni los comentarios sobre la posibilidad de que puedan alcanzar ya a EE.UU.
En Brasil, las novedades con las informaciones que apuntarían a un escándalo de corrupción que envolvería al presidente Temer pasan por el contundente desmentido del mismo, y su petición de que se archive la causa. El Bovespa brasileño rebotó el viernes cerca de un 3%, y recuperó una tercer aparte de las caídas del día anterior.
En Asia, tenemos subidas del Nikkei del 0,45%, apoyadas por una caída del Nikkei. La Bolsa de Shanghái ha perdido algo más de medio punto.
En Europa hoy no tenemos ninguna referencia macroeconómica a destacar. El Eurogrupo se reúne para tratar el tema de Grecia, asunto que despierta optimismo, pese a ser una cuestión muy secundaria para los inversores.
En EE.UU. se publicará a las 14:30 el índice de la actividad nacional de la Fed de Chicago.
Ahora mismo, el sector de recursos básicos es el más alcista, frente al de tecnológicas, que es el que peor lo está haciendo.
Tenemos también unas declaraciones poco prometedores en torno al Brexit: desde el Reino Unido no solo se niegan a pagar a Europa la cantidad que ésta parece pedir, si no que deslizan que tendría que ser Europa quien les pagase a ellos tras la negociación.
En divisas, el EUR/USD sigue pegado a 1,12, después de una nueva caída del billete verde el pasado viernes.
En materias primas, el petróleo continua subiendo, alentado por la expectativa de que los países productores lleguen a un acuerdo para prolongar los recortes.
En resumen: tranquilidad en las bolsas, que se recomponen desde los mínimos del pasado jueves. Lo fortaleza de la tendencia parece que se impone por el momento. Sin embargo, estamos ante la generación de nuevos catalizadores con mucha capacidad para dañar dicha tendencia alcista.