En los últimos años la mayoría de los inversores se han quedado fuera de la subida que han tenido las bolsas. Y personalmente creo que ha tenido mucho que ver con el hecho de que la mayoría de los analistas e “influencers” del sector hayan transmitido todo tipo de miedos, ya sea a una supuesta crisis, a una burbuja bursátil, a la llegada de una recesión o a cualquier cosa que asuste a los inversores y busquen así la protección de esos analistas e “influencers” que cuidarán de sus ahorros.
La estrategia de utilizar el miedo para captar clientes ha tenido otra característica: la transmisión de información parcial y, en algunos casos, directamente sesgada. Resaltar lo negativo, ignorar lo positivo y así generar temor. El ejemplo más claro lo tenemos en la forma en que se ha tratado el tema del incremento de la deuda global.
Qué duda cabe que el volumen de deuda, especialmente la de los países avanzados, se ha incrementado en los últimos años, alcanzando niveles cercanos a los que había antes de la crisis de 2008. Pero lo que no se dice es que, desde el 2008 hasta ahora, también ha crecido el producto interior bruto (PIB) de muchos de esos países, especialmente el del más endeudado, que es EE.UU. Si aumentan las deudas de una persona o de una empresa, pero en paralelo aumentan sus ingresos y el valor de su patrimonio, no es tan grave como si solo aumentaran las deudas.
Tampoco se dice que no es lo mismo que aumente la deuda si los tipos de interés se reducen que si se mantienen estables o aumentan. Especialmente si se reducen y caen a niveles ridículamente bajos, como es el caso en la actualidad. Eso hace que la financiación de la deuda sea cada vez más fácil. Si se habla del tamaño de la deuda y no se mencionan los tipos de interés, se está ofreciendo una información sesgada.
Otra información sesgada es la que dice que las bolsas suben exclusivamente como resultado del dinero que inyectan los bancos centrales en la economía. Esto también tiene un aspecto cierto, pero lo que no se dice es que dónde más han subido las bolsas —EE.UU.— las subidas han ido acompañadas de una mejora de los resultados empresariales.
Incluso admitiendo que esa mejora de los ingresos de las empresas tenga mucho que ver con las inyecciones de liquidez de los bancos centrales, ¿no se hicieron precisamente también para eso, para que mejore la situación y la financiación empresarial y, en consecuencia, la inversión y el empleo? Además, mientras la subida de las bolsas vaya acompañada de una mejora de los beneficios empresariales y sea acorde con esa mejora de los beneficios, ¿cuál es el problema?
Lo importante no es lo que haya subido la bolsa, sino si está cara o barata. Si suben los ingresos y/o los beneficios tiene toda su lógica que suba la bolsa. Lo vemos en el gráfico número 3. La parte de arriba, la línea blanca, es el índice SP 500 de la bolsa norteamericana. La parte de abajo, la línea rosa, representa la valoración de esa bolsa, de forma que, cuanto más arriba está esa línea, más cara está la bolsa. Si la bolsa sube mucho, como es el caso, pero también suben los beneficios empresariales, aunque suba no tiene por qué estar cara. Y un PER de 19,5 no es que sea barato, pero está dentro de la media histórica. La línea amarilla junto al SP 500 mide los ingresos por acción de las empresas cotizadas y, como puede verse, se mueve casi en paralelo al SP 500. Sobran los comentarios.
En el caso de la bolsa europea la situación es diferente, porque en Europa no aumentan significativamente los beneficios empresariales. Pero la bolsa europea ha subido mucho menos que la bolsa norteamericana desde 2010, de forma que el PER de la bolsa europea está claramente por debajo del de la norteamericana.
Quienes hablan de burbuja bursátil no mencionan estos datos ni tampoco que, por ejemplo, la rentabilidad por dividendo de la bolsa europea (3%) comparada con el tipo de interés de los bonos a diez años (entorno al 0% o negativa) es históricamente alta, o, dicho de otra manera, que la valoración de las bolsas europeas comparando el dividendo con la rentabilidad de los bonos es históricamente baja.