Los principales índices bursátiles europeos cerraron AYER de forma mixta, sin grandes variaciones, pero con la mayoría de los sectores registrando perdidas. De esta tónica general se desmarcaron dos de los sectores que peor comportamiento han tenido en el último año: el bancario y el del automóvil. Cabe señalar que ambos comenzaron la sesión a la baja, producto de las tomas de beneficios parciales, ya que los inversores más cortoplacistas aprovecharon las fuertes alzas que han experimentado en los últimos días muchos de estos valores para realizar plusvalías. Sin embargo, y a medida que avanzaba la sesión, ambos sectores se giraron al alza. El bancario tras conocerse el contenido de las actas de la reunión del Consejo de Gobierno del BCE del pasado marzo, en las que se mostraba como algunos de sus miembros abogaron durante la misma por oficializar el retraso de la primera alza de los tipos oficiales hasta finales del 1T2020. Finalmente, y como señalamos en nuestra sección de Economía y Mercados, se optó por evitar compromisos temporales y dejar que los próximos movimientos de tipos dependieran directamente de la marcha de la economía de la región. Además, AYER se filtró que el banco italiano UniCredit (MI:CRDI) estaba estudiando la posibilidad de lanzar una oferta sobre el alemán Commerzbank (DE:CBKG) si las negociaciones entre estas entidades y el Deutsche Bank (DE:DBKGn) no salían adelante. Siempre que se habla de potenciales operaciones corporativas el sector se anima, como se pudo comprobar AYER. Por su parte, el sector del automóvil, uno de los que puede salir más favorecido si finalmente EE.UU. y China firman un acuerdo comercial, se animó tras la revisión al alza de algunas recomendaciones sobre algunos valores pertenecientes al mismo. El resto de sectores, como ya hemos señalado, cerraron entre planos o con pérdidas, destacando el mal comportamiento de los valores relacionados con las materias primas minerales y con el petróleo, valores en los que se dejaron notar las ventas de los inversores, que aprovecharon los importantes repuntes que han experimentado las cotizaciones de muchos de ellos en la última semana.
Señalar que el Ibex-35 fue AYER uno de los índices que mejor se comportó, gracias al buen comportamiento del sector bancario y de Telefónica (MC:TEF), valores que mantienen una elevada ponderación en el Selectivo.
Por su parte, los principales índices de la bolsa estadounidense cerraron al alza, con la excepción del Nasdaq Composite, que AYER se vio lastrado por el mal comportamiento del sector tecnológico, especialmente de los fabricantes de software. En sentido contrario, el Dow Jones fue el índice que mejor lo hizo, impulsado por Boeing (NYSE:BA), valor que tiene en el mismo un peso relativo de casi el 10% y que AYER subió cerca del 3%. En esta bolsa, cuya actividad volvió a rozar los mínimos del año, la atención la monopolizó el reinicio de las negociaciones comerciales a un primer nivel entre EEUU y China. En este sentido, señalar que, a pesar de que todo el flujo de noticias sobre la marcha de las negociaciones fue muy positivo, con los presidentes de EE.UU. y China, Trump y Xi, mostrándose muy optimistas, al igual que lo hizo el vice primer ministro chino Liu He, los inversores se mostraron AYER prudentes y evitaron “excesos” de confianza -ver sección de Economía y Mercados para más detalle sobre la marcha del acuerdo comercial entre ambas potencias-.
HOY esperamos, no obstante, que el sentimiento positivo sobre la evolución de las mencionadas negociaciones permita abrir ligeramente al alza a las bolsas europeas. A falta de la referencia de las bolsas chinas -los mercados de China, Taiwán y Hong Kong están cerrados por la celebración de festividades locales-, cabe destacar el moderado buen comportamiento del resto de mercados de la región, algo que debe influir positivamente a la apertura de la renta variable europea.
Por lo demás, comentar que, a parte de las negociaciones entre EE.UU. y China, que proseguirán en Washington durante la jornada, la principal cita del día es la publicación en EE.UU. de las cifras de marzo sobre el mercado laboral. Se espera que la economía estadounidense, tras el frenazo experimentado en febrero, vuelva a generar cerca de 180.000 nuevos empleos no agrícolas y que la tasa de desempleo se mantenga en el 3,8%. No obstante, habrá que estar muy atentos a la publicación de la evolución interanual del salario medio por hora en el mes, que se espera crezca a una tasa del 3,4%. De ser así, y con la inflación rondando el 1,5%, los consumidores estadounidenses estarían ganando una importante capacidad de compra, lo que es muy positivo para la marcha de esta economía en la que el consumo privado supone casi dos terceras partes del PIB. Además, y por la mañana, en Alemania y España se conocerán la producción industrial de febrero. En este sentido, señalar que AYER los pedidos de fábrica alemanes del mismo mes volvieron a sorprender muy negativamente, y ya caen a una tasa interanual superior al 7%. Nada que no sepan los inversores, que ya descuentan un escenario de contracción en el sector de las manufacturas europeo, pero que no deja, por ello, de ser preocupante.