Los principales índices de referencia europeos abrieron al alza el martes 24 de septiembre, tras el anuncio del Banco Popular de China (BPC) de nuevas medidas de flexibilización encaminadas a alcanzar su objetivo de crecimiento anual del 5%. Los futuros del Euro Stoxx 50 subieron un 1,14%, los del FTSE 100 un 0,52% y los del DAX un 0,73%.
China presenta el mayor paquete para impulsar su economía
Tras el enorme recorte de tipos de la Reserva Federal la semana pasada, el Banco Popular de China (PBOC) anunció un recorte del 0,5% del coeficiente de reservas obligatorias (RRR), que representa el porcentaje de depósitos que los bancos deben mantener en reservas en el banco central. Esta rara medida fue acompañada de una reducción del 0,2% del tipo repo a siete días. Además, el PBOC dio a conocer un paquete histórico de 5,3 billones de dólares (4,8 billones de euros) destinado a reducir los tipos hipotecarios y los requisitos de entrada para los compradores de segundas viviendas.El Gobernador Pan Gongsheng anunció una inyección de liquidez de 500.000 millones de yuanes (64.000 millones de euros) para apoyar a los mercados bursátiles, permitiendo a las empresas de valores y seguros invertir en renta variable a través de préstamos del banco central.
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En respuesta, los mercados bursátiles de toda Asia se dispararon, con el índice Hang Seng saltando más de un 3% y los mercados de China continental subiendo más de un 2%. El índice MSCI Asia Pacific subió un 0,7%. Sin embargo, el índice australiano ASX 200 sufrió un ligero descenso después de que el Banco de la Reserva de Australia (RBA) mantuviera estable su tipo de interés y mantuviera unas perspectivas restrictivas.
Es probable que los valores mineros europeos suban
Las medidas de estímulo expansivas del Banco Popular de China para apoyar su mercado inmobiliario también han impulsado los precios de las materias primas sensibles al crecimiento. Los futuros del cobre subieron un 2,1% hasta los 4,44 dólares por libra, el nivel más alto desde julio. Los metales preciosos también experimentaron una fuerte subida, con los precios del oro al contado alcanzando un nuevo máximo por encima de los 2.635 $ la onza, mientras que los futuros del oro aumentaron más de 10 $ hasta alcanzar los 2.663 $ la onza. Los futuros de la plata subieron un 1,22%, hasta 31,47 $ la onza a las 8.00 CEST.Las materias primas energéticas, como el crudo y el gas natural, también siguieron su ejemplo, beneficiándose del repunte generalizado de las materias primas. Los futuros del mineral de hierro (SGX TSI Iron Ore 62%) subieron un 1,1% a 92,40 $ por tonelada métrica.
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Es probable que la subida de los precios de los metales refuerce los valores mineros y energéticos europeos, dando un impulso a los sectores industrial y de materiales. Se espera que los esfuerzos de China por estabilizar su asediado mercado inmobiliario aumenten la demanda de metales industriales y minerales críticos, que son productos clave para grandes empresas mineras como Rio Tinto (LON:RIO), Glencore (LON:GLEN), Anglo American (JO:AGLJ) y BHP.
En los últimos cuatro meses, el sector minero ha registrado un rendimiento inferior a nivel mundial debido al desplome de los precios de las materias primas. El índice Euro Stoxx 600 Basic Materials ha caído un 4,67%, mientras que el índice paneuropeo Stoxx 600 ha subido un 7,9% en lo que va de año.
Los recortes de tipos esperan impulsar un repunte de los mercados a corto plazo
Dado que es probable que los bancos centrales mundiales aceleren sus ciclos de relajación, los mercados de renta variable podrían seguir beneficiándose de las políticas monetarias favorables al crecimiento a corto plazo. Se prevé que el Banco Central Europeo (BCE) profundice sus recortes de tipos durante lo que queda de año, tras el inesperado descenso de la actividad empresarial registrado el martes.Los datos revelaron que los PMI manufactureros y de servicios siguen contrayéndose en las principales economías europeas, incluidas Francia y Alemania. Sin embargo, los inversores podrían mostrarse cada vez más cautos ante el empeoramiento de las condiciones empresariales y el inminente riesgo de una recesión económica mundial.
Persisten los temores de recesión, alimentados por el empeoramiento de los datos económicos y la escalada de las tensiones geopolíticas, con los conflictos en curso en Oriente Próximo y Ucrania.