MADRID (Reuters) - El selectivo de la bolsa española cerró la semana con recogida de beneficios, muy lastrado por el preponderante sector bancario, una vez disipado el efecto positivo de la decisión de la Reserva Federal de mantener sin cambios los tipos de interés en Estados Unidos.
En el sector bancario las caídas fueron generalizadas después de que el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, abogara por un sistema financiero con menos entidades para mantener la rentabilidad.
"Es una jornada de fin de semana de recogida de beneficios, pero con un fondo alcista que debería continuar la semana que viene", dijo Sonia Tardío, operadora de CM Capital Markets.
En este contexto, el Ibex-35 retrocedió un 1,25 por ciento a 8.823,6 puntos, aunque en el acumulado semanal registró un alza del 2,20 por ciento, mientras que el índice paneuropeo STOXX 600 descendió un 0,72 por ciento.
Caixabank (MC:CABK), tras la venta de su autocartera la víspera, se dejó un 3,75 por ciento a 2,25 euros, alineándose con el precio al que colocó el 9,9 por ciento de su capital para levantar 1.322 millones de euros y reforzar su capital ante el desembolso previsto en la opa por el portugués BPI (LS:BBPI).
En el resto del sector bancario, Bankia (MC:BKIA) y Sabadell (MC:SABE) retrocedieron un 3,13 por ciento y un 4,14 por ciento respectivamente. En tanto, Santander (MC:SAN) se dejó un 3,25 por ciento y BBVA (MC:BBVA) un 0,68 por ciento.
Entre las excepciones alcistas de la jornada destacaron ArcelorMittal (MC:MTS), con una subida del 2,42 por ciento, y ACS (MC:ACS), que sumó un 0,7 por ciento.
Repsol (MC:REP) también se colocó en positivo con un leve avance del 0,04 por ciento, tras darse la vuelta el precio del petróleo por las expectativas de una próxima reunión de productores la semana que viene en Argelia.
Entre los valores industriales, Inditex (MC:ITX) bajó un 1,22 y Telefónica (MC:TEF) un 0,93 por ciento, mientras que la eléctrica Iberdrola (MC:IBE) se dejó un 0,86 por ciento.