Nueva York, 17 mar (.).- Wall Street recuperó este martes algo de terreno con respecto al perdido el lunes, el tercer peor día de su historia, y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, rebotó un 1,42 % en una jornada que se espera volátil y en la que la preocupación de los inversores disminuyó ligeramente tras el anuncio del presidente de EE.UU., Donald Trump, sobre medidas de apoyo a empresas afectadas por la crisis del COVID-19.
Cinco minutos después de la apertura de la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones avanzaba unos 240 puntos, hasta aproximadamente 20.434 enteros, mientras el selectivo S&P 500, cuyas pérdidas en la última semana han obligado a parar las operaciones hasta en tres ocasiones, ganaba un 1,5 % hasta los 2,419 puntos.
Asimismo, el índice compuesto del mercado Nasdaq, que aglutina a importantes empresas tecnológicas, rebotaba un 1 % o hasta los 6.978 enteros.
El parqué neoyorquino abrió en verde después de su peor día desde el lunes negro de 1987, con retrocesos en los principales indicadores de entre un 12 y un 13 %.
Durante la volátil apertura de este martes, con el Dow fluctuando entre ganancias y pérdidas, llegando a ganar hasta 500 puntos para luego rozar el rojo con rapidez en tan solo 15 minutos, mientras que el sentimiento generalizado de los inversores para la sesión de hoy es ligeramente positivo tras el anuncio de Trump en el que ha afirmado que ayudaría financieramente a las industrias, como el sector aéreo, que estén sufriendo las consecuencias más severas de la crisis del COVID-19.
A través de Twitter, el presidente señaló que Estados Unidos "apoyará poderosamente a aquellas industrias, como las aerolíneas y otras, que se están viendo particularmente afectada por el Virus Chino -sic-. Volveremos a ser más fuertes que nunca".
Además, los analistas señalan que el parqué ha recibido de forma positiva la noticia de que el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, pedirá a los legisladores de la Cámara de Representantes paquetes de estímulos de hasta 850.000 millones de dólares, o más, para que la economía estadounidense resista al impacto del COVID-19.
De momento, al menos 4.281 casos de este patógeno se han confirmado en Estados Unidos, que ha tenido problemas para llevar a cabo los tests, con más de 70 muertos, según datos del Instituto John Hopkins.
Por ahora, los inversores se centran en descifrar si los estímulos de la Reserva Federal, los paquetes de ayuda y la gestión de la crisis serán suficientes para evitar una recesión económica y, en caso de que sea inevitable, si se alargará en el tiempo.
Por sectores, las mayores ganancias eran para los servicios públicos (3,11 %), el de bienes esenciales (3 %) y el de salud (1,21 %).
En otros mercados, el barril de petróleo de Texas perdía a esta hora un 0,49 %, hasta los 28,56 dólares.