Las bolsas europeas prosiguen su tono claramente alcista, reforzado a partir de las 14:30 del día de ayer, con el discurso de Mario Draghi tras la reunión del BCE.
Desde hace semanas se venía especulando con la idea de que la autoridad monetaria podría tomar nuevas medidas expansivas. Especialmente, desde que, en la reunión de septiembre, el BCE revisó a la baja en un 50% sus previsiones de inflación para 2016, desde el 1,6% hasta el 1,1%, nivel que quedaba muy alejado del objetivo de control de precios.
Con todo, el mercado no había descontado de forma visible ningún anuncio concreto. Prueba de ello es que la semana pasada, el EUR/USD rompía la resistencia de 1,14, lo que no sucedía desde el 24 de agosto.
Pero lo comentado ayer en la rueda de prensa por parte de Mario Draghi ha arrojado una gran nitidez sobre las intenciones del BCE. Pese a que se esperaba un lenguaje prometedor en cuanto a la posibilidad de asistir a más estímulos, el mensaje que se transmitió superó claramente las expectativas, teniendo mucha más contundencia de lo que se preveía.
El BCE va a evaluar en la próxima reunión de diciembre las condiciones actuales del QE, siendo posible que asistamos a una ampliación de las mismas en esa reunión, en la que también se actualizarán los cuadros macroeconómicos.
Además, ha señalado que el programa de compras durará tanto como sea necesario para llevar la inflación al objetivo y que ayer se llegó a discutir una reducción de la tasa de depósitos bancarios, por debajo del -0,2% actual. Esta medida tendría como principal efecto el aumentar el espectro de bonos que pueden ser adquiridos por la entidad.
Así pues, podemos afirmar con elevadísima seguridad de que, a corto plazo, el QE será reforzado.
Este anuncio viene a reforzar el perfil alcista de las Bolsas adquirido desde finales de septiembre. Si nos fijamos en lo que sucedió en los parqués europeos desde que a mediados de enero se empezó a descontar el anuncio del QE, observamos revalorizaciones cercanas al 20% en los dos meses posteriores.
En el mercado de divisas, se va a dar la circunstancia de que el BCE y el Banco de Japón (BoJ) van a añadir laxitud a sus políticas monetarias, prácticamente en el mismo momento en el que la Reserva Federal (Fed) y el Banco de Inglaterra (BoE) procedan a elevar los tipos de interés. En los próximos seis meses, veremos probablemente al EUR/USD acercarse a la paridad.
Además de la subida de las bolsas, encabezadas por el Dax (y por el sector automovilístico), y de la fuerte caída del euro, tenemos una fuerte subida en el precio de los bonos europeos.
La rentabilidad de los bonos españoles e italianos a 2 años pisan terreno negativo por primera vez en la historia, mientras que los bonos alemanes a 5 años también entran en rentabilidad negativa.
Los bonos portugueses mejoran además porque el presidente de la República se ha decantado por encargarle la formación del Gobierno al Candidato conservador vencedor de los comicios.
Wall Street también celebró lo anunciado por Draghi. El S&P 500 se anotó un 1,87%, mientras que el Nasdaq subió un 1,66%.
Al cierre, los resultados de Google (O:GOOGL), Microsoft (O:MSFT) y Amazon (O:AMZN) parecen también positivos.
Las Bolsas asiáticas también se han unido a la fiesta, con ascensos del Nikkei del 2,1%, y del 1,3% de la Shanghai Composite.
La agenda macro del día nos ha dejado los datos de PMI preliminares del mes de octubre en Francia y Alemania, quedando por encima de lo esperado en ambos casos.
El general de la Eurozona de manufacturas ha salido en 52, cuando se esperaba 51,7; y el de servicios, ha quedado en 54,2 frente a 53,5.
En resultados empresariales, hemos conocido buenas cifras de Sabadell (MC:SABE), Viscofán (MC:VIS), Cellnex (MC:CLNX) o Michelin (PA:MICP) o Electrolux (ST:ELUXb), y no tan buenas de Caixabank (MC:CABK).
Esta tarde en EE.UU. conoceremos los resultados de resultados American Airlines (O:AAL), Cabot Oil & Gas (N:COG), Procter & Gamble (N:PG), Whirlpool (N:WHR).