Terminamos el viernes con una nueva triple corona en EE.UU., con máximos históricos en Nasdaq 100, S&P 500 y Dow Jones de Industriales. No son los únicos. Los selectivos de Australia, Francia y Alemania o el MSCI World también se han sumado a esta moda que poco a poco va calando entre los índices mundiales de renta variable, lo que contrasta con los asiáticos como el Nikkei, China A50 y Hang Seng, mucho más débiles.
Estos nuevos máximos se producen en un contexto de desaceleración económica en EE.UU., tal y como advierten las previsiones para el tercer trimestre que publica el Banco de la Reserva Federal de Atlanta que ha revisado el crecimiento del PIB al 6%, el más bajo desde el mes de abril tras conocer los últimos datos de empleo y de comercio mayorista. Otros indicadores como el Leading Index de ECRI y el mal dato de Sentimiento del Consumidor de la Universidad de Michigan, en mínimos desde 2011, parecen confirmar este escenario. Aunque las tasas de crecimiento se encuentran aún en niveles que llaman al optimismo, la tendencia para los próximos meses es negativa.
Por otro lado, las expectativas de inflación se mantienen estables desde el mes de mayo. Por el momento, continuamos con el trade de estanflación durante el mes de agosto que anunciamos la primera semana de julio. Sin embargo, el último dato de CPI más contenido que lo que nos venía acostumbrando últimamente, además de dar un cierto respiro a la Fed, aumenta significativamente la probabilidad de entrar en un trade de deflación en los próximos meses. Esto último es algo para tener en cuenta por la rotación sectorial que conllevaría, así como por su potencial impacto en commodities.
El apetito de los inversores por el riesgo se mantiene intacto. Esta semana, los ETFs de renta variable han recibido 14.600 millones más de efectivo, según datos de FactSet (NYSE:FDS), de los cuales 13.600 han recaído en bolsa americana, la gran beneficiada esta semana. Los ETFs de renta fija han tenido flujos netos de efectivo por valor de 3.725 millones de dólares.
En el mercado de derivados, destaca especialmente el cierre del 53% de las posiciones largas en el Oro de los inversores institucionales, y del 57% en la Plata. Parecería que estuvieran ajustando su posición a un escenario de potencial caída de las expectativas de inflación en los próximos meses. Algo parecido ocurre con el Crudo, que ha visto cómo se ha ido reduciendo su peso un 37% desde la tercera semana de junio. Continúa tímidamente la reducción de exposición al S&P 500, y la apertura de nuevos cortos en el Nasdaq y el Russell 2000 por los Hedge Funds, que esperan un frenazo en ambos índices. En este contexto, nuestros modelos siguen apostando por la renta variable frente a la renta fija, y especialmente por la bolsa americana frente a la internacional. Es probable que, en la próxima revisión mensual, la exposición a commodities se vea reducida de manera significativa.
Seguimiento de la fuerza relativa tendencial
Sigue mejorando una semana más. Mientras el porcentaje de índices mundiales con el indicador de fuerza relativa tendencial en verde se mantiene en el 71%, el índice agregado ha mejorado sustancialmente hasta el 34%, y ya son 6 los índices al 75% de su potencial. No es de sorprender que entre ellos se encuentran el índice Australia y de Francia que han terminado la semana en máximos históricos. Por el lado negativo, el índice HangSeng sigue siendo el más negativo, seguido por el IBEX-35.
La incorporación de cada vez más sectores a la subida del S&P500 es un hecho. Sólo dos de ellos (Energía y Servicios de Comunicación) se encuentran con fuerza negativa o neutra, mientras aumenta el índice de fuerza relativa agregado a 45, una lectura muy alcista. Salvo cambios significativos en cierres diarios, esperaríamos que esta tendencia se mantenga. La estrategia de cortos en XLE y largos en XLK termina la semana con una rentabilidad acumulada del 9,3% desde el 9 de julio. En situaciones como ésta, en la que un porcentaje elevado de los activos se encuentra en situación alcista, las estrategias market neutral pierden potencial respecto de la selección selectiva de activos en tendencia, por lo que damos por finalizado este trade.
Actualización de niveles críticos
No ha habido cambios relevantes esta semana en los niveles críticos de los inversores institucionales, excepto en lo que respecta a los Hedge Funds que comenzarían a ejercer mayor presión vendedora en el Nasdaq en los 14.853 puntos frente a los 14.730 puntos de la semana anterior. La pérdida de este nivel aumentaría la posibilidad de caídas hasta 14.658.
Mientras el S&P 500 se mantenga por encima de 4.219 y el Nasdaq por encima de 14.658, esperaríamos una continuación de la tendencia, aunque con riesgo creciente de correcciones, especialmente a partir del miércoles, coincidiendo con los primeros vencimientos de derivados sobre el CBOE VIX y el S&P 500.
¡Buena semana y buenas inversiones!